El renombrado autor y conferencista Deepak Chopra llega a Lima este 29 de agosto para ofrecer una noche inolvidable con su conferencia “Awakened Life”. En esta presentación, Chopra explorará las grandes preguntas que nos mantienen cautivos en una sociedad condicionada: ¿Estamos en medio de un importante cambio de paradigma? ¿Existe una verdadera esencia del ser humano? ¿Tenemos la capacidad de influir en el futuro de la evolución humana? A través de prácticas que buscan conectar con la conciencia superior, Chopra promete guiar al público peruano hacia un despertar espiritual y un mayor entendimiento de su potencial transformador.
En conversación con El Comercio, Chopra destacó la importancia de liberarnos de la “hipnosis del condicionamiento social”, una trampa creada por nuestras construcciones económicas, culturales y religiosas. Enfatizó que la verdadera realidad es infinita y divina, sin las limitaciones impuestas por la sociedad. Al entender y experimentar esta realidad profunda, podemos despertar y transformar nuestras vidas, superando miedos ancestrales y abrazando una existencia llena de empatía, compasión y alegría. Esta conferencia es una oportunidad única para aquellos que buscan iniciar o profundizar su viaje espiritual.
–¿Cuáles son los elementos que nos mantienen dormidos o inconscientes como sociedad?
Son construcciones sociales las que nos mantienen dormidos como sociedad. Esto significa que hemos aceptado lo que comúnmente se conoce como la “hipnosis del condicionamiento social”, que puede ser un condicionamiento económico –si uno es pobre o rico–. Puede ser un condicionamiento cultural, religioso o ancestral. Básicamente vivimos en un mundo construido donde nuestra conciencia está restringida y estamos casi como en una caja y no podemos salir de ella.
En la realidad más profunda, no hay caja: cualquier caja la creas tú y la crea la sociedad, y esto se remonta a 40.000 años atrás, o quizás unos pocos miles de años antes. Los seres humanos, como cualquier otro animal, tenían lenguaje solo para tres cosas: comida, sexo y peligro, porque así es como sobrevivimos. El Homo sapiens es la primera especie que creó un lenguaje para las historias y tan pronto como ello, creamos modelos, el dinero, la idea de los estados nacionales, el colonialismo, los imperios, y ahora estamos apretados en esta caja.
Entonces, ¿qué es la realidad? Sin la caja, es infinita. Es irreductible, es fundamental, no tiene espacio, no tiene causas y es divina. La base de nuestra existencia es la base de toda existencia. Cuando entendemos eso, podemos decir que esa es la vida despierta.
–Cuando ponemos las cosas en perspectiva, parece que estamos atrapados dentro de todos los conceptos que la sociedad nos ha impuesto. ¿Cuáles son los primeros pasos que podemos dar para despertar y romper estas construcciones?
Tienes razón. Estamos atrapados y no es nuestra culpa. Esta trampa se ha ido construyendo lentamente durante 40.000 años. Sin embargo, si miras históricamente, hay gente que salió de la trampa. Mira la vida de Jesús, de Rumi, de Buda. Mira la vida de algunos de los profetas del Antiguo Testamento. Mira la vida de los sabios de Upanishads. Todos ellos tuvieron lo que antes llamamos “la experiencia religiosa”, pero no la religión como dogma, sino la experiencia religiosa que te permite encontrar tu verdadera identidad, que es infinita. Ese es el primer paso.
El segundo es que surge espontáneamente lo que se llama cualidad platónica: empatía, compasión, amor, alegría, ecuanimidad. Tercero: pierdes el miedo a la muerte. La muerte no te ocurre a ti, sino a la trampa; pierdes el miedo a la muerte de manera experiencial.
–¿Cómo se relacionan la experiencia religiosa y la vida espiritual?
En la sociedad secular está está de moda decir: “no soy religioso, soy espiritual”. La experiencia religiosa y la experiencia espiritual son lo mismo. No son diferentes. Es el dogma, la ideología, la institución que se construye a su alrededor, lo que puede diferir en la interpretación de la experiencia.
El conflicto en el mundo se debe a que, en lugar de que las personas tengan experiencias ellas mismas, simplemente creen en la experiencia del otro. En lugar de decir: “voy a adorar a Jesucristo”, por qué no nos preguntamos: ¿qué experimentó él? ¿Cómo puedo experimentar eso? Esa es la forma en que salimos de la trampa. Hoy tenemos muchas formas de hacerlo: gracias a la tecnología podemos difundir cualquier idea, ya sea en Internet, a través de la IA, a través de conversaciones colectivas, a través de simposios.
Este es un momento muy interesante porque las luminarias de la historia estaban confinadas a pequeñas regiones. El mundo cristiano nació en un área pequeña; la filosofía india estaba limitada a unos pocos cientos de personas; pero hoy podemos crear una “pandemia” de despertar. Es una gran oportunidad para nosotros.
–¿Cree que esa es la razón por la que la gente ahora está tan ansiosa por encontrar su camino espiritual?
Sí, la gente se está dando cuenta del mundo que hemos creado, en el que pensamos que tener dinero, tener una relación o ser exitosos es la única forma de ser felices en algún momento. Sin embargo, muchas personas se dan cuenta de que su alegría o felicidad no ha aumentado. De hecho, a veces empeora: cuanto más tienes, peor se pone, porque nunca termina (la necesidad de tener más). Se convierte en un ciclo perpetuo.
También está la negación el miedo a la vejez, el miedo a la enfermedad y el miedo a la muerte. Esto ha existido desde siempre y no hay una solución material para eso. La única solución es descubrir quién eres y eso sucede cuando despiertas.
–¿Qué puede suceder a nivel de sociedad cuando los humanos despierten?
Si hay una masa crítica de despertar, podríamos ver un mundo más pacífico, sostenible, saludable y alegre. No habría conflictos, injusticia social, económica ni racial. La gente viviría en un planeta sostenible, y ahora mismo podemos ver que está sucediendo lo contrario. Nos centramos en la mecanización profunda de las armas nucleares, la guerra cibernética, la guerra biológica o los drones. Nos centramos en matarnos unos a otros, y matarnos a nosotros mismos. Estamos caminando dormidos hacia la extinción porque hemos estado reciclando conceptos medievales.
La tecnología ha ido mucho más allá de nuestro desarrollo emocional y espiritual. Es muy peligroso tener una mente medieval y la tecnología moderna, así que o nos despertamos o el universo dirá: “La especie humana fue una buena idea, un buen experimento que no funcionó. Probemos algo más”. Somos un planeta entre un estimado de 60 mil millones de planetas habitables solo en la Vía Láctea, y hay dos trillones de galaxias en este momento. Cuando miras el panorama general, que la especie humana sobreviva o no, no hace ninguna diferencia. Es un grano de arena en todas las playas del mundo. La única razón para despertar es por nosotros mismos.
–El camino del despertar parece ser muy personal. ¿Cómo podemos ayudar a las personas que están “dormidas”?
En primer lugar, tienen que darse cuenta de que están dormidos. Si no lo saben, no hay deseo de despertar. En segundo lugar, hay un camino personal. Se llama Dharma, que significa cómo encajamos en el orden del universo. Cuando estás en Dharma, te involucras en el autodescubrimiento y la introspección, alineas tus acciones con tus valores, expresas tus dones y talentos únicos, cultivas la paz interior y el bienestar, sirves a tu comunidad con un impacto positivo, aceptas el aprendizaje y el crecimiento continuos, cultivas tu intuición inicial, tu brújula interna y tu deseo de despertar.
Ahora tenemos acceso a las enseñanzas de toda la humanidad, ya sea Platón, Sócrates, Pitágoras, los sabios de Upanishads o las grandes luminarias de la humanidad. Tenemos acceso directo a su mente en este momento y a las tecnologías que emplearon para que podamos aprender de ellos. Así que esta es una era sin precedentes, pero es necesario que las personas tengan conciencia del despertar. Por ejemplo, yo vivo en la ciudad de Nueva York y no creo que la mayoría de la gente con la que me cruzo en las calles esté pensando: ”¿quién soy? ¿Qué quiero? ¿Cuál es el significado y el propósito de mi vida? ¿Existe Dios?”. La persona promedio no se preocupa y eso se debe a que nació en la trampa.
–Ha vivido el camino de la sabiduría y compartido mediante más de 90 libros. ¿Cómo practica usted en el día a día esta vida despierta?
Mi Dharma es servir para sanar y alcanzar una masa crítica. Como resultado de eso, sabes no experimento ansiedad ni estrés y me siento alegre todo el tiempo. Por supuesto, hago yoga, meditación, ejercicios de respiración, duermo bien y cuido mi dieta. Pero todo eso es automático. No es algo que requiera esfuerzo porque vengo practicándolo por al menos 45 años.
–¿Cómo pueden las personas incorporar estos hábitos y estas prácticas que quizás parecen mucho esfuerzo en este mundo abrumador y consumista?
Hay muchas maneras de hacerlo. Hay libros que interesan a la gente; yo mismo he escrito 97 libros y todos tratan sobre esto. Hay aplicaciones, hay profesores disponibles en línea. Creo que, en última instancia, uno tiene que hacer su propio descubrimiento. La gente puede mostrarte el mapa, pero tú tienes que recorrer el territorio. Yo puedo mostrarte un menú, pero a menos que comas no sabrás lo que significa el menú.
–Para quienes son nuevos en el camino de la espiritualidad y el autoconocimiento, ¿qué consejo les darías para empezar?
Yo diría que se tomen unos minutos cada día para estar en silencio y preguntarse también a sí mismos: “¿Quién soy? ¿Qué quiero? ¿Cuál es mi propósito? ¿Por qué estoy agradecido?”. Así comienza el viaje de la introspección: con un poco de silencio. Sin embargo, las preguntas tienes que hacerlas tú mismo. Solo tú, en última instancia, conoces las respuestas que otras personas han recorrido el camino. Tienes que recorrerlo para luchar contigo mismo. Las herramientas, el mapa y las direcciones están ahí, ahora tienes que decidir qué camino seguir.
–Sobre esos caminos, ¿cuáles son las consecuencias de seguir una vida despierta y seguir una vida inconsciente?
En última instancia, una vida inconsciente conducirá al sufrimiento. Esa es la condición humana. La vejez, la muerte, el sufrimiento, la enfermedad, el miedo, la ansiedad, la ira, la hostilidad, la culpa, la vergüenza, la depresión. Estas son las pandemias de la era moderna, no el COVID, que es solo un subproducto de eso.
–En relación a ello, ¿por qué cree que la gente tiene tanto miedo de sentir sus sentimientos?
Una de las construcciones sociales que se ven desde la Revolución Científica de hace 500 años, es cuando Galileo contradijo al Papa. Descartes creó la filosofía del dualismo, con el espíritu de un lado y la materia del otro. Al principio se generó este conflicto entre la ciencia y la espiritualidad que era conveniente porque el Papa podía encargarse del espíritu y los científicos podían encargarse del mundo físico, que pasó exactamente igual en la época de Jesucristo. Él dijo que se podía rendir lealtad al César o a lo Divino. Son términos diferentes, pero este conflicto entre el intelecto y el corazón ha existido desde siempre.
La Revolución Científica tuvo mucho éxito. La gente empezó a pensar que para acercarse a la verdad, la ciencia es el único método, pero no es así. La ciencia es un método para acercarse a la verdad. Nuestra verdad científica se basa en una banda muy pequeña y estrecha de actividad perceptiva, que llamamos realidad, y hemos creado métodos para explorar esa hipótesis por observación científica. El método científico es muy bueno; sin embargo, hemos sido hipnotizados una vez más con la idea de que lo emocional, mental y espiritual no es real, pero eso no es verdad. Cuando combinamos los hechos, con la inteligencia emocional y la inteligencia espiritual, dejas de asumir lo que es el mundo y empiezas a preguntarte de dónde viene todo. ¿Fue Dios o el Big Bang? Profundizamos un poco más y nos preguntamos: ¿qué sucede si me deshago de todas estas ideas por completo? ¿Qué es la realidad sin ningún constructo social? ¿Cómo puedo experimentar eso? ¿Necesito una combinación de corazón y mente?
–Esta es una pregunta más personal. Desde mi despertar espiritual, cada día parece un poco más difícil existir en este mundo físico, en este mundo donde tienes que producir, consumir, trabajar y usar tu tiempo en cosas que no necesariamente permiten que el espíritu crezca. ¿Qué consejo le daría a las personas que se sienten como yo?
Esa es una buena señal, porque tienes lo que se llama en las tradiciones espirituales, el descontento divino. Eso te motiva a explorar más y libera tu creatividad y tu imaginación también, que son atributos divinos, por cierto. La creatividad y la imaginación no son producidas por el cerebro; el cerebro responde a tu impulso, pero el cerebro no es la fuente de la creatividad. Al igual que una pantalla de televisión, no es la fuente del programa. Hay alguien detrás de esto. Así que es un muy buen comienzo. Pero en última instancia también es un desafío porque necesitamos una masa crítica de más personas como tú que tengan un descontento divino.
–¿Qué espera que el público peruano se lleve de su próxima conferencia en Lima?
Como mínimo obtendrán herramientas para el bienestar personal y la inteligencia espiritual. Algunos se sentirán inspirados y otros realmente emprenderán el viaje. Lo interesante es que la gente que viene a mis charlas ya se ha elegido a sí misma. No creo que pueda conseguir, por ejemplo, que un señor Trump asista a mis charlas. El público latinoamericano está más comprometido y es más reflexivo. Además, está impulsado por las emociones y la pasión, que es una buena combinación. El mundo hispano es muy diferente: de hecho más gente lee mis libros en español a nivel mundial.
–Finalmente, para un principiante que está realmente ansioso por entrar en este despertar espiritual, ¿cuáles son sus tres libros principales que recomendaría?
1. Conocer a Dios
2. El libro de los secretos
3. Metahumano
Ahora tengo “Dharma digital”, que saldrá muy pronto, que mostrará cómo usar la AI para entenderte a ti mismo, sin necesidad de recurrir alguien más. Además, he lanzado una plataforma llamada DigitalDeepak.ai, en la que puedes hacer cualquier pregunta sobre espiritualidad y recibirás la respuesta en mi voz. Es gratis y para cuando visite Perú, la plataforma estará disponible en español.
Para asistir a la conferencia de Deepak Chopra en Lima, puedes comprar las entradas en este enlace.