Recientemente, Mayo Clinic Health Letter publicó la historia de Cynthia Weiss, trabajadora de su institución y sobreviviente de cáncer de ovario. En este artículo, Weiss comenta sobre las múltiples lecciones que aprendió durante este camino. A través de su historia, ella cuenta sobre las emociones que experimentó durante este proceso por el cual múltiples personas están pasando.
“Yo tenía 33 cuando empecé a experimentar los primeros dolores que me llevaron al doctor. Era 2003, no me había casado, no tenía hijos y era una persona generalmente saludable, viviendo mi vida al máximo. Nunca me esperé un diagnóstico de cáncer. Sin embargo, eso fue lo que recibí del doctor, pues tenía cáncer ginecológico en etapa 4″, señaló Weiss.
Hace 20 años, conseguir información sobre los diagnósticos y apoyo de otros pacientes era complicado. “En internet existía hace apenas 10 años y era complicado encontrar grupos de apoyo. Por ende, los especialistas de la salud no tenían muy en claro los efectos a largo plazo de un tratamiento para el cáncer, como lo saben hoy en día”, añadió la sobreviviente.
Luego de sobrevivir al cáncer dos veces, Cynthia Weiss recolectó las cinco lecciones más valiosas que aprendió durante este tratamiento, las cuales les comentaremos a continuación.
1. Obtener una segunda opinión
Cynthia señala que siempre es necesario tener una segunda opinión, incluso puede ser muy útil obtener una tercera y cuarta. Según ella, es beneficioso escuchar las recomendaciones de otros profesionales, tanto en las opciones de tratamiento como en las terapias que se puedan recibir.
En ese sentido, aconseja tomarse un tiempo para analizar las opciones y seleccionar la mejor. “Cuando elijan, tiene que ser con el doctor con el que se sientan más cómodos. Tienen que sentirse en confianza con ellos y con las metas que les planteen para cada tratamiento o terapia, además de iniciar con actitud positiva”, señaló la sobreviviente de cáncer de ovario.
2. Preguntar y seguir preguntando
El paciente es totalmente libre de preguntar todo lo que no esté entendiendo. Sobre todo cuando inician situaciones desconocidas para él o ella. En el caso de Cynthia, por ejemplo, fue inducida a la menopausia en sus treintas. Por ello, nunca tuvo en claro qué era lo que eso iba a ocasionar en su cuerpo.
“Mi consejo es preguntar todo lo que crean necesario sobre los tratamientos, los riesgos, la enfermedad, la longitud del proceso, los efectos secundarios, las terapias, las cirugías y los exámenes necesarios”, estableció.
3. Estar abierto a nuevos tratamientos
“En 2014, el día después de Acción de Gracias, desarrollé un dolor abdominal, el cual iba volviéndose más intenso. Seis meses después, volvió el dolor, al igual que dos semanas después. Así fue sucediendo durante el siguiente año y medio. Después de hablar con múltiples especialistas, no obtuve nada. Sin embargo, años después, descubrí que múltiples terapias y tratamientos podrían haber ayudado a calmar ese dolor”, comentó la trabajadora de Mayo Clinic.
Por esa experiencia, su consejo es aceptar y estar abierto a nuevos tratamientos. Sin embargo, también resalta que es común tener miedo y decir que no.
4. Habla con otros sobrevivientes
Como paciente de cáncer, es normal sentir que no tienes el control de lo que sucede, pues el cuerpo reacciona de maneras impredecibles. Cuando eso sucede, puede ser muy útil conocer y conversar con personas que hayan pasado por lo mismo. Los consejos que pueden brindarte serán muy útiles, al igual que sus experiencias.
5. Mantenerse positivo
Es completamente normal tener un nivel de miedo. La ansiedad también aumenta después de cada diagnóstico o antes de un tratamiento. De ese modo, el cáncer no se trata sólo de manera física, sino que es fundamental también aprender a sobrellevar un estilo de vida saludable, priorizando la salud mental.
“Recientemente conversé con un vecino que tuvo cáncer de páncreas y me preguntó ‘¿Cuánto tiempo te tomó dejar de pensar en el cáncer todos los días?’. Le respondí que todos somos distintos, pero que a mí me había tomado 10 años”, afirmó Weiss.
Las lecciones de Cynthia Weiss pueden ser de mucha utilidad para los que recién están iniciando este proceso, el cual puede ser un camino lleno de temor y aprendizajes.