¿Por fin decidiste dejar la vida sedentaria de lado y comenzar a hacer un poco de ejercicio? Como principiante, debes entender que es importante avanzar paso a paso hasta llegar a un punto en el que ya no sientas que “odias entrenar”.
Estos son algunos de los beneficios que observarás cuando empieces a entrenar:
- Disminución del riesgo de enfermedades crónicas.
- Mejora del humor y de la salud mental.
- Niveles estables de energía durante el día y mejora de la calidad del sueño.
- Mejora de la salud cerebral.
- Efecto positivo en el microbioma.
- Mejora de la vida sexual.
Estás son las claves que te ayudarán para empezar a hacer deporte:
1. Fija un objetivo de forma realista. Como principiante, es importante que antes de comenzar a hacer ejercicio te fijes un objetivo, esto ayudará a mentalizarse para alcanzar tus metas. Como toda meta, esta debe ser planteada de forma realista, ya que de no ser así podrías sentirte decepcionado o con una sensación de fracaso. Evita imponerte presiones innecesarias.
2. Reconoce tus límites y no te excedas. Debes ser consciente de tu condición física y, de ser posible, acudir a un médico especialista para conocer el tipo de deporte o ejercicio que tu cuerpo necesita. Por ejemplo, esto es fundamental en el caso de mujeres que quieren hacer deporte después del parto.
3. Comienza con ejercicios de poca dificultad. Si bien ir a un gimnasio nos ayuda muchísimo para comenzar a hacer deporte, dar el primer paso en casa también marca una gran diferencia. Estos son algunos ejercicios de baja intensidad que te ayudarán a controlar tu respiración y mejorar tu condición física:
- Cardio: Te ayudan a elevar tu ritmo cardíaco y a controlar tu respiración. Por ejemplo, correr o andar en bicicleta.
- Flexibilidad: Mejoran tu movilidad y activan toda tu musculatura.
- Fuerza: La meta es ganar fuerza muscular, para eso se hace uso del peso corporal como aliado para mejorar la resistencia.
4. Las rutinas divertidas harán más fácil el entrenamiento. Evita pensar de forma constante en tu meta y comienza a diseñar una rutina de ejercicios funcional, con la que te sientas cómodo y pases un buen momento mientras te ejercitas.
5. Una buena alimentación es fundamental. Siempre debes tener en cuenta la importancia de la alimentación, evita las grasas en exceso y comienza a beber más agua. No es necesario que sigas una dieta estricta para lograr alcanzar tus objetivos, sino en consumir los alimentos correctos y en cantidades moderadas para tener suficiente energía. Puedes comenzar intentando cocinar más y comprando menos comida precocinada.
Recuerda que todo es parte de un proceso y para adoptar el hábito de hacer deporte, debes desechar los hábitos sedentarios. Si comienzas a hacer deporte en casa, fija horarios de entrenamiento que se ajuste a tu estilo de vida y prepara un espacio en que casa que te motive hacerlo. Deja las excusas, tu cuerpo y tu mente te agradecerán