Según especialistas en urología del Seguro Social de Salud- EsSalud, durante la pandemia por la COVID-19, se incrementaron los casos de incontinencia urinaria, siendo las mujeres las más afectadas. En ese sentido, es vital que una persona que padece -o crea padecer- de esta condición sea consciente de lo que sucede y no tenga temor de acudir a un especialista, pues puede ser tratada para continuar con una vida normal.
De acuerdo con la Encuesta Global de Higiene y Salud, realizada por Essity, 1 de cada 4 personas evitan hablar de esta condición por vergüenza. Por ello, en muchos casos, una incontinencia urinaria puede iniciar en un nivel leve o moderado y, al no recibir la atención correspondiente, derivar a un extremo grave.
“Muchas veces, la incontinencia suele tomarse como un tabú, pues un grupo de personas lo toma desde la broma. Sin embargo, debemos tener en cuenta que es una condición como cualquier otra y puede afectar a personas activas y conscientes o como cualquiera”, enfatizó Gloria Caycho, Licenciada en Obstetricia y especialista de TENA.
Para empezar, cabe aclarar que la incontinencia urinaria consiste en la pérdida involuntaria de orina que presenta una persona. En palabras de la especialista, se puede dar en cualquier lugar, pues el afectado no tiene la capacidad de controlarlo. “La pérdida puede ir desde un ligero goteo hasta pérdidas moderadas”, añadió.
¿Qué consecuencias tiene la incontinencia?
Como se mencionó previamente, la incontinencia urinaria es la pérdida incontrolada de orina en una persona. Existen tres niveles: leve, moderado y grave. No obstante, una persona puede iniciar con un nivel leve y, cuando la enfermedad esté más avanzada, puede aumentar a un nivel de mayor gravedad.
“Principalmente, es una condición que se presenta en personas adultas mayores. De todas maneras, es posible que lo presenten adultos jóvenes. En las mujeres, por un lado, es un poco más común que en los varones, pues ciertas condiciones fisiológicas facilitan la aparición de esta enfermedad”, estableció la Lic. Caycho.
Si la incontinencia no es tratada correctamente y a tiempo, puede llevar a que el paciente padezca ciertas complicaciones. “La incontinencia urinaria puede derivar a infecciones en la piel por bacterias y hongos. Asimismo, puede generar efectos en la piel, como dermatitis. Además, ocasiona cambios en el aspecto social psicológico, puesto que algunas personas no son conscientes de que pueden vivir una vida plena y normal con este problema”, recalcó la especialista.
La licenciada hizo énfasis en que, si una persona no sabe qué significa tener incontinencia urinaria, va a sentirse avergonzada y empeorará sus niveles de autoestima, lo cual cortará su vida social.
En las mujeres, por un lado, es un poco más común que en los varones, pues ciertas condiciones fisiológicas facilitan la aparición de esta enfermedad.
¿Cómo se puede tratar la incontinencia urinaria?
La experta indicó que el tratamiento para esta condición depende de lo que ocasione la enfermedad y el nivel de efectos. Por ejemplo, en algunos casos, la incontinencia suele ser un síntoma de otras enfermedades. “En el caso de la diabetes, esta enfermedad puede generar incontinencia y, si una persona maneja correctamente su condición diabética, se puede mejorar considerablemente”, especificó.
Si el paciente cuenta con incontinencia en nivel leve o moderado, se puede mejorar con la asesoría de un experto. Por otro lado, si la condición es ocasionada por un tema fisiológico, se puede sobrellevar con una cirugía.
Caycho hizo hincapié en que, para poder asignar un tratamiento, es vital asistir a una revisión médica para identificar la causa. “Hoy en día, existen muchos avances que podrían ayudar a la persona, pero se debe tener un conocimiento total de su caso”, comentó.
