RETO VIAJERO 2017: Camino Inca a Machu Picchu

No soy amante de los trekkings. La única vez que caminé 10K en un viaje fue por una emergencia climática, que provocó que el auto que nos ahorraría ese esfuerzo quede atracado en el fango. Fueron horas de sufrimiento, con una mochila en la espalda, los zapatos hundidos en el lodo y la noche que amenazaba con alcanzarnos. Aquella vez no disfruté nada. Ni el ejercicio, ni la vista y como para coronar el momento, una víbora hizo su aparición y nos dejó consternados con lo que pudo ocurrir y jamás pasó.

Pero como soy una viajera que gusta de ver los destinos de siempre desde otra perspectiva, estoy pensando en darle la oportunidad a una ruta que tengo pendiente hace buen tiempo: un tramo de la extensa red de caminos incas, conocidos como Qhapaq Ñan, que conducen a la actualmente llamada Llaqta de Machu Picchu en Cusco. Todo un reto para mí.

Foto: Sernanp / Harol Alagón

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BIEN ACOMPAÑADO

El primer paso es tomar un paquete en alguna de las 200 agencias autorizadas por el Sernanp: conócelas aquí. OJO: solo es posible ingresar al Camino Inca de Machu Picchu en compañía de un guía.

También se debe tener una condición física óptima: “El nivel de exigencia de la caminata es un poco fuerte. Si nunca hiciste ejercicio tendrás que entrenar algunos meses antes de hacerlo”, me dice Harol Huamán, representante del Sernanp.

Foto: Sernanp / Heinz Plenge

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LA MEJOR TEMPORADA

Como la mejor época para recorrerlo es entre mayo a octubre, porque no hay lluvias, me queda tiempo para prepararme. Lo que debo ir haciendo es la reserva pues además de ser un destino muy solicitado, la capacidad es de 500 personas  incluyendo guías, porteadores y otras personas que acompañan a los viajeros. Lo recomendable es reservar seis meses antes.

Si bien el trayecto es el mismo, uno debe considerar cuántos días puede caminar.

La ruta tradicional, dura 4 días y recorre un tramo de 33,7 kilómetros desde Piscacucho, a la altura del km 82. Harold señala que en esta “los viajeros atraviesan diversos ecosistemas: pajonal andino, montaña, bosque nublado. El segundo día se alcanzan los 4.200 metros de altitud (en el abra Warmiwañusca). En el camino se observan complejos arqueológicos como Llaqtapata, Willkarakay o Sayacmarca y el cuarto día se ingresa a la Llacta de Machu Picchu, situada a 2.450 metros”.

Hay otra ruta que inicia en el km. 88 de la vía férrea, a la altura de Q’oriwayrachina, en la que se caminan 29 kilómetros. El recorrido más largo se extiende por 42,6 kilómetros desde el distrito de Mollepata y el más corto parte de Chachabamba (en el kilómetro 104) y se puede hacer en un solo día. Este último, se inicia al amanecer y, alrededor de las 2 p.m., el caminante ingresa por el Intipunku o Puerta del Sol a Machu Picchu. Hay quienes caminan hasta el pueblo, comen algo y descansan esa noche para pasar más horas en la Llaqta, al día siguiente.

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CONTACTO NATURAL

Transitar por un sendero que comienza en los andes y culmina en la selva es una aventura única que te permite ver el cambio de geografía y clima. Si vas de marzo a mayo o de octubre a diciembre es posible ver orquídeas. También es un corredor ideal para observar aves, venados y hasta huellas de osos andinos.

Aquí, un video sobre el avistamiento de osos en el Santuario de Machu Picchu. Un plus que no quisiera perderme.

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INVERSIÓN

Este es un factor relevante. Si tomo la ruta clásica, de 4 días, tendré paquetes de entre US$600 a US$1.800 que incluyen guías especializados, alimentación y camping. En el caso de hacerla en uno o dos días, el precio promedio es de US$350 con ingresos, alojamiento, guía y alimentación.

La diferencia en las tarifas se percibe en las comodidades o lujos que se desee tener: “de acuerdo al servicio que contrate, se puede contar con un chef y menaje de cristal. Hay agencias que te dan una carpa básica de montaña y otras que brindan almohadas de plumas”, ejemplifica Harol.

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¿QUÉ ME PONGO?

Cuando sepa qué ruta elegir y para cuánto me alcanza debo considerar algunos básicos como camisas o polos de manga larga para evitar las picaduras de mosquitos. Algunos requieren el uso de bastones, en ese caso solo se permiten los que tienen punta de goma.

“No está científicamente comprobado pero recomendamos usar colores que se mimeticen con el entorno para no perturbar la naturaleza”, comenta la especialista de la Unidad Operativa Funcional de Turismo de Sernanp, Pamela Salazar. Evita usar amarillos, rojos o naranjas. Opta por el verde, gris o azul. Es imprescindible llevar bloqueador solar y gorra.

Foto: Sernanp / Heinz Plenge

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A TENER EN CUENTA

Al ingresar al Camino Inca de Machu Picchu debo registrarme en los puestos de control. Por si no lo sabes, hay áreas específicas para acampar. Los residuos producidos deben volver conmigo o con la agencia. Y no es apropiado hacer ruidos molestos, fogatas y mucho menos dañar el lugar. ¿Estás listo para asumir el reto?

No olvides seguirme en Facebook e Instagram. Nos vemos en la próxima parada.

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* Imagen destacada: Sernanp / Harol Alagón