Buenos Aires: 5 consejos para viajar barato

Buenos Aires es un destino con las 3B: bueno, bonito y barato. Una ciudad de contrastes. Con barrios tradicionales, hipster y bohemios, en los que conviven el fútbol, el tango y el choripan. Con una riquísima oferta cultural, bares notables, mercados gastronómicos, librerías que son monumentos y precios bajos, producto del cambio del dólar blue -o paralelo- que resulta favorable para los peruanos.

San Telmo. Foto: Checklist Viajero

Imposible resistirse a planificar un viaje para allá. Como acabo de volver de Buenos Aires, en plan ‘low cost’, te presento los mejores consejos para que puedas recorrer esta ciudad sin gastar mucho:

1. Vuela en una aerolínea de bajo costo

Por si no lo sabes, la aerolínea JetSmart acaba de inaugurar la ruta Lima – Buenos Aires. Me fui con ellos en su vuelo inaugural y en solo 4 horas y media arribé en la capital argentina. Por ahora ofrece tres vuelos semanales, a partir de octubre serán cuatro y en diciembre, tendrán una salida diaria. Pero sin lugar a dudas, la mayor ventaja son sus precios: desde 90 dólares por tramo, más impuestos.

Foto: Checklist Viajero

¿Cómo encontrar los vuelos más baratos? La clave está en comprar los pasajes con, al menos, tres semanas de anticipación al viaje. Benjamín Dulanto, gerente comercial de JetSMART en Perú, asegura que “siempre será más conveniente anticiparse, tanto para viajes nacionales como al extranjero. Conforme se va llenando el avión se incrementan los precios”.

Esfuérzate por viajar ligero. Los precios más bajos te permiten volar únicamente con un bolso de mano y en un asiento aleatorio. Recuerda que en las aerolíneas de bajo costo te cobran por cada servicio adicional: equipaje de mano, flexibilidad, embarque prioritario, asientos o impresión de tarjeta.

2. Visita los atractivos gratuitos

Inicié el viaje en el barrio de San Telmo, uno de los más tradicionales de Buenos Aires. En el cruce de las calles Defensa con Chile está la escultura de Mafalda y a unos pasos, la casa de Quino, que reconocí por la placa de la fachada. Son gratuitos, también, el mercado de San Telmo, que ahora cuenta con propuestas gastronómicas, y la plaza Dorrego, en donde cada domingo se arma una feria de antigüedades y bailarines de tango.

Foto: Visit Buenos Aires

Continué hacia el barrio de La Boca, lugar que albergó a los primeros inmigrantes italianos y donde algunos historiadores aseguran que se fundó Buenos Aires. Hice fotos frente al estadio de Boca Juniors y después, en el famoso pasaje Caminito, que en solo 150 metros tiene infinidad de spots: casas coloridas, balcones gratuitos y esculturas. Ojo: por seguridad, camina por aquí solo hasta las 3 p. m.

El segundo día lo dediqué al barrio de Recoleta, una zona residencial que fue poblada por familias pudientes que escapaban de la fiebre amarilla que azotó Buenos Aires en 1871. Partí de la plaza Intendente Alvear, más conocida como Francia, en donde se ubica la iglesia del Pilar, la más antigua de la ciudad y que luce retablos coloniales. Al costado, el famoso cementerio en donde está la tumba de Eva Perón y que puede ser visitado a diario (5 dólares).

A unos pasos, el Centro Cultural Recoleta que presenta una potente agenda de arte y música. El Museo Nacional de Bellas Artes exhibe obras de Goya, Rubens, Rembrandt y Picasso. ¿Lo mejor? Es de ingreso libre. La foto del día fue frente a la Floralis Genérica, una escultura móvil que abre y cierra sus pétalos según la luz que caiga sobre ella.

Foto: Checklist Viajero

Luego de almorzar en el mercado San Nicolás, fui directo al Ateneo Grand Splendid, la librería más hermosa del mundo según la revista National Geographic y que funciona al interior de un antiguo teatro. Figuras como Carlos Gardel han pasado por su escenario, hoy convertido en un café y rodeado de unos 200.000 libros de diversos temas. ¡De lujo!

También hubo tiempo para ver los atractivos del Centro Histórico como la Plaza de Mayo, que de un lado luce la Casa Rosada y del otro, la catedral (abre de 7:30 a.m. a 6 p.m.), en donde están los restos de Don José de San Martín. Sobre la avenida 9 de julio, que con 140 metros es la más ancha del mundo, está el famoso Obelisco. Hacerse una foto con las iniciales de Buenos Aires puede tomar algo de tiempo porque hay cola, así que opta por otro ángulo.

Librería Ateneo. Foto: Visit Buenos Aires

Los bosques de Palermo, con sus rosedales y lagunas, el arte urbano de Palermo Soho o el barrio joven de Puerto Madero se pueden disfrutar de día y de noche, sin gastar demasiado.

3. Camina todo lo que puedas

La ruta descrita la hice a pie. Mi recomendación es que recorras dos barrios por día, si cuentas con poco tiempo. Para ello, conviene identificar los atractivos que sí o sí quieres ver. Puedes planificar tu itinerario con la ayuda del Google Maps o consultar por los recorridos autoguiados del Ente de Turismo de Buenos Aires. Encuéntralos aquí.

Foto: Visit Buenos Aires

Para distancias largas usa el transporte público. La tarjeta Sube cuesta 126 pesos argentinos y cada viaje en subte,  42 pesos (0.15 dólares). Los taxis se pueden tomar en la calle y cobran tarifas más que razonables. Por ejemplo, un servicio de Recoleta a Puerto Madero cuesta unos 3 dólares.

4. Come con poca plata

Los bares notables, nombrados así por las celebridades que acudían, son de visita obligada. En La Poesía (Chile 502, San Telmo) probé el típico desayuno porteño, con café con leche y medialunas (2 dólares). Aunque también sirve ravioles, sorrentinos o capelettis (desde 3 dólares) y milanesas con papas (4,3 dólares).

Foto: Visit Buenos Aires

El mercado San Nicolás (Av. Córdoba 1750) reúne a 16 sitios de comida en el barrio de Recoleta y es conocido por sus buenos precios. En Ama Pasta sirven un menú que incluye un plato de fondo, vino y café, (4 dólares). También hay combos de sánguches con gaseosa (3 dólares), así como propuestas locales y extranjeras.

En Palermo, anímate a probar los clásicos choripanes en El Chori por 3 dólares (Thames 1653). También, son recomendables los bodegones, con recetas clásicas, sabores caseros y precios accesibles.

5. Usa efectivo

Antes del viaje leí que había que dejar las tarjetas en la billetera. Por experiencia, te sugiero presentarlas solo para el registro en el hotel y pagar con dinero en efectivo cualquier consumo que realices durante tu estancia. De lo contrario, el banco te dará el cambio oficial y gastarás más.

Foto: Visit Buenos Aires

Es importante entender que en Argentina existen dos tipos de cambio: el oficial (que se encuentra en casas de cambio autorizadas y bancos) y el llamado dólar blue (que es más favorable, pero que implica riesgos como ir a lugares no autorizados). Un consejo para lograr una mejor cotización es llevar billetes de cien dólares, en buen estado y sin sellos.

Si piensas hacer un viaje internacional en los meses que vienen, considera Buenos Aires y su oferta ‘low cost’. Acabo de volver y te puedo asegurar que es posible disfrutar sin gastar demasiado. Para más datos sígueme en las redes:

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** Los precios indicados son referenciales. El viaje se realizó a fines de septiembre y el cambio es muy variable.