Acho: un reto para que la Municipalidad de Lima y la SBLM demuestren eficacia
Se requiere relanzar la marca Acho conmemorando el aniversario, rediseñar el modelo de gestión y erradicar a la Municipalidad del Rímac.
PABLO J. GÓMEZ DEBARBIERI
Ante su 250 aniversario y a solo 10 meses de la Feria del Señor de los Milagros −que deberá ser notable e inolvidable, la cumbre de la conmemoración del cuarto de milenio−, Acho no tiene quien la gestione.
Hay dos necesidades paralelas: la urgencia de diseñar una gestión confiable en un año notable para Acho y que −yendo al fondo del asunto− se replantee de raíz la forma de gestionarla y cómo darle actividad a lo largo de todo el año.
Acho es el buque insignia de la tauromaquia en el Perú, la que gracias al crecimiento económico, al canon para las regiones y a la paulatina descentralización, ha alcanzado un auge notable y en aumento. Lo prueban más de 650 festejos taurinos anuales, con la asistencia de más de tres millones de compatriotas.
La Sociedad de Beneficencia de Lima (SBLM), propietaria de la plaza, que depende del alcalde de Lima, tiene una responsabilidad histórica. No hay en todo el país un monumento que durante dos siglos y medio haya sido, ininterrumpidamente, un crisol vivo de la cultura nacional. Ni Sacsayhuamán, donde, solo una vez al año y en la actualidad, se celebra el Inti Raymi. Responsabilidad de la SBLM y fuente de ingresos para ella. Pero el afán recaudador –depredador, incluso− de las pasadas administraciones de la SBLM, ha conducido a un punto que impide seguir por ese rumbo, salvo que se extinga la función y rentabilidad de Acho, matando la propia SBLM su gallina de los huevos de oro.
La clave del éxito para Acho y la SBLM, son precios asequibles y clientes −aficionados− satisfechos. Se requieren tres condiciones: una base muy baja por el piso de plaza, participando la SBLM de las utilidades operativas (eso exige empresas formales y muy serias), satisfacción −encuestando a los abonados, que están empadronados y son la voz del cliente, respecto a las empresas que postulen− y contrarrestar o inclusive eliminar la injerencia abusiva de la Municipalidad del Rímac y sus alcaldes, que creen que Acho es un botín a saquear en territorio ocupado.
250 años requieren soluciones imaginativas y serias. Por ejemplo, la participación de la SBLM en esta feria de aniversario, relanzando la marca “Acho”, mientras se diseña un nuevo modelo empresarial: una iniciativa público privada o un concurso que descarte empresas poco serias, informales o que no cuenten con la aceptación de los abonados, asegurando que la SBLM reinvierta parte de sus beneficios en Acho, así como eliminando la nefasta intromisión de la Municipalidad del Rímac.