Tips para escoger la chimenea ideal para tu casa

Nada mejor que generar una atmósfera acogedora durante los días fríos con una chimenea a leña o gas, ya sea en la sala, el dormitorio o el baño. Ambas requieren de un ducto para liberar el humo al exterior. “Las primeras son capaces de mantener caliente áreas de hasta 60 m2, mientras que las segundas de hasta 45 m2”, señala Carlos Lam, de Rotonde.

A estas se suman, las ecológicas que no requieren de un conducto de ventilación o tanque de gas, por lo que es posible trasladarlas de un lugar a otro. Utilizan etanol como combustible. “Las hay de sobremesa, fijas, con ruedas, ideales para espacios pequeños y abiertos (balcón, terraza, patio). Pueden incluso estar integradas a un mueble, como el centro de entretenimiento o aparador”, indica Alexander Pezzua, de Bioflama.

Además de generar un punto de luz y sumar calidez, las de dos y tres caras de vidrio son capaces de separar dos ambientes al empotrarlas en una pared o estructura que actúe como elemento divisor, por ejemplo, de la sala y el comedor o la cocina, permitiendo a su vez apreciar el fuego desde cualesquiera de las estancias. Otra forma interesante de exhibirlas y que adquieran total protagonismo es suspendida del techo, dejando a la vista el tubo.

Su instalación se efectúa en superficies resistentes al calor, como el drywall, el ladrillo o el concreto, en acabados de piedra, porcelanato, papel decorativo o estucado. También en mobiliarios de madera, MDF y melamina. En una propuesta contemporánea, encajan las fabricadas en acero inoxidable y de diseño lineal u orgánico. En tanto, las forjadas en hierro fundido sintonizan con una estética clásica, rústica o industrial.

En el dormitorio, empotra una chimenea en la pared opuesta a la cabecera de la cama o en uno de los muros laterales, para crear un entorno cálido. Reviste el muro con papel tapiz que imite la textura de la madera, para introducir un acento rústico. También puedes optar por una de pie de forma esférica y ubicarla entre la cama y el rincón de lectura, para generar una separación visual sutil.