Ecologistas y artistas del Pantanal, un santuario natural compartido por Brasil, Bolivia y Paraguay, iniciaron hoy una campaña en defensa del jaguar (Panthera onca), que se encuentra en la lista de especies amenazadas de extinción.

La campaña fue anunciada en la ciudad de Corumbá, en el estado de Mato Grosso do Sul y corazón del humedal conocido como Pantanal, que se extiende sobre 250.000 kilómetros cuadrados.

Esa región es el hábitat de miles de especies animales y vegetales, algunas únicas en el planeta, y uno de los pocos refugios que le quedan al jaguar, conocido en Brasil como onça pintada.

CULTURA MEDIOAMBIENTAL La campaña en defensa de ese felino ha sido promovida por la Fundación Boticario de Protección de la Naturaleza y comenzó con una serie de eventos culturales y lúdicos con los que se pretende dar a la sociedad una mayor información sobre este felino.

Lo que se quiere es llevar conocimiento e información y, de alguna manera, influir en las actitudes de las personas, desde los niños hasta los adultos, dijo la científica Grasiela Porfirio, una de las promotoras de la campaña.

La primera actividad de esta campaña ha sido el Sábado de la Onça, que hoy captó la atención de cientos de habitantes de Corumbá y de turistas mediante obras de teatro, talleres sobre ecología y una exposición fotográfica, todo centrado en el felino amarillento y de manchas negras.

Conociendo más sobre la onça y descubriendo su importancia para el Pantanal, es posible que las personas se preocupen más por su existencia, declaró Gustavo Gaertner, otro de los promotores de esta iniciativa.

Según diversos estudios científicos, las principales amenazas que pesan sobre el jaguar son la cacería furtiva y el avance de las fronteras agrícolas.