“Soy NRV, de 16 años de edad, natural de Pucallpa. Soy la tercera hija de una familia y el gran sueño que tenía era ser una abogada porque quería ayudar a las personas que necesitan justicia y a los más pobres. Sin embargo, durante la pandemia de 2021 me encontré embarazada y el presente año ya no pude continuar mis estudios por asumir una responsabilidad de mi embarazo y cuidado de mi bebé, y también por no contar con los recursos económicos ni con el apoyo de mi familia” dice el tesitmonio de una adolescente peruana.
Agrega que: “También tengo vergüenza de asistir en mi colegio, debido a que todos mis compañeros y compañeras no me van a mirar bien. De igual manera, los profesores no brindan las facilidades para seguir estudiando, ya que eso he visto en otras compañeras a las que les pasó lo mismo; mejor dicho, no encuentras el apoyo necesario ni en tu familia ni en el colegio. Me siento frustrada y triste por no seguir estudiando. Tal vez, más adelante lo podré hacer”.
El caso de NRV no es un hecho aislado. El embarazo adolescente es una de las grandes problemáticas que se afronta hoy en día en el Perú, debido a las dificultades para acceder a una educación sexual. Durante la pandemia, las dificultades de los adolescentes para acceder a la atención en salud integral, que incluye salud sexual y reproductiva, han sido mayores.
Según el Ministerio de Salud (Minsa), estas atenciones cayeron en un 67% a nivel nacional en el primer semestre de 2020 en comparación con el mismo periodo del 2019. En cifras totales, se pasó de atender a 110.195 adolescentes a 35.980.
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Las regiones de la Amazonía peruana tienen los índices más altos de embarazo adolescente en el país. Ucayali registra, según INEI, el 20.2%, es decir 2 de cada 10 adolescentes entre 15 y 19 años de edad son madres o están embarazadas por primera vez. Esta situación está directamente relacionada con la pobreza y el abuso.
La estrategia de Salud Sexual y Reproductiva registra en los datos estadísticos un gran porcentaje de embarazo adolescente del 2020 hasta la fecha sobre todo en los distritos de Calleria, Manantay Raymondi y Yarinacocha.
En el sector de educación considera que de acuerdo al Diseño Curricular Nacional los contenidos de Educación Sexual Integral (ESI) se encuentran en las áreas curriculares de primaria y secundaria. En el nivel secundario las áreas que incluyes ESI son: Persona Familia Relaciones Humanas y Tutoría en todos los grados, así como en Ciencia y Tecnología Ambiente.
La Dirección Regional de Educación para la prevención de embarazo en los adolescentes tiene aliados estratégicos como Cooperación (UNICEF), ONGS como Manuela Ramos, Flora Tristán etc., que vienen contribuyendo en la implementación de la Educación Sexual Integral como una estrategia para prevenir el embarazo adolescente en las instituciones de educación secundaria de manera focalizados.
A fin de garantizar la equidad de la educación y el derecho a la permanencia en la escuela de alumnas embarazadas o madres, las autoridades indican que vienen implementado en las instituciones educativas de las zonas urbanas la Ley 29600, ley que fomenta la reinserción escolar por embarazo. Así mismo cuenta con Lineamiento de Tutoría y orientación educativa básica (RVM N° 212-2020 MINEDU).
La directora de Gestión Pedagógica (DREU), Angela Villacorta, manifiesta que trabajan en la implementación de la Educación Sexual Integral en las instituciones educativas de nivel secundario donde los directores y docentes se capacitan para institucionalizar la ESI. En alianza con la DIRESA están implementando paquetes de atención integral en colegios de manera focalizada, cercanas a las postas. Sin embargo, indica que actualmente es un poco difícil su implementación por el contexto político.
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Asimismo, sostiene que, en contextos rurales, donde hay adolescentes embarazadas y madres, hay experiencias de directores que implementan estrategias para lograr la permanencia y culminación de su trayectoria escolar.
A nivel regional se tiene espacios de articulación: Una mesa de prevención de embarazo adolescente y un Sistema Regional de atención integral de niños, niñas y adolescentes- SIREAINNA. No obstante, debido a los cambios y rotación de los funcionarios en la gerencia de salud social se ha ralentizado el desarrollo de un trabajo articulado.
La coordinadora del Centro Desarrollo Juvenil del Hospital Amazónica de Yarinacocha, la obstetra Jheny Berrospi Almeyra, declaró que desarrollan la prevención de embarazo precoz a través de las atenciones integrales que se brinda al adolescente, como las consejerías en orientación de Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) como el VIH - SIDA, planificación familiar y habilidades sociales, siendo importante para el desarrollo de su vida sexual, qué condiciones de protección y los riesgos que se presentan.
En los colegios más cercanos, en el trabajo articulado multisectorial se brinda las orientaciones a los adolescentes para la prevención del embarazo precoz y sus consecuencias, básicamente mayor índice de deserción escolar, más pobreza de la región y país, y las muertes maternas en adolescentes desarrollando.
En el presente años estamos en un promedio de 180 a 200 embarazo adolescentes hasta el mes de mayo. Es muy importante involucrar a las familias que son actores protectores, desarrollando una comunicación, teniendo un espacio donde las adolescentes se sientan protegidas y con toda la información para la toma de decisiones. El alto porcentaje de embarazo de las adolescentes es responsabilidad de todos los actores debemos contribuir para reducir las tazas en nuestro distrito y región.