¿Sabías que cada minuto se destruyen más de 15 hectáreas de bosques tropicales? ¿O que al mismo tiempo más de 1700 toneladas de basura terminan directamente en el océano? ¿O peor aún, que también cada minuto mueren en el mundo tres niños por beber agua en mal estado?
El Perú, desde hace varias décadas, se encuentra en riesgo ante el aumento de la contaminación ambiental y no es un caso aislado, sino parte del problema de todo el mundo. Cuidar y proteger el medio ambiente es tarea de todos. Pero, específicamente, ¿cuál es el rol que desempeñan los estudiantes en el futuro de nuestro país?
Mónica Ramos, ingeniera industrial, especialista en sostenibilidad ambiental y fundadora del proyecto Resto Zero, que promueve modelos de negocio para una economía circular, afirma que “los colegios son espacios donde se concentran las mentes de jóvenes que generan ideas y ponen en movimiento la energía que tienen, con el propósito de generar un impacto ambiental porque es el mundo en el que viven y reciben”.
Números preocupantes
Nuestro país está alcanzando cifras alarmantes de contaminación ambiental debido a problemas que se incrementan como la deforestación, que en el año 2020 alcanzó la más alta cifra de los últimos años, o la degradación del suelo, el consumo elevado de energía o la contaminación de lagos, ríos y mares.
La región Lambayeque, según el Inventario Nacional de Áreas Degradadas por Residuos Sólidos Municipales elaborado por el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) del Ministerio de Ambiente, es la región con mayor extensión de áreas afectadas por botaderos, con un total de 438 hectáreas.
Además, se reconoció 30 áreas degradadas por residuos sólidos, lugares donde se acumulaban sin las consideraciones técnicas ni permisos de las autoridades correspondientes. Por otro lado, en la ciudad de Chiclayo se reportó contaminación de las acequias, específicamente PULEN y COIS, por los residuos sólidos y aguas residuales según la investigación de la Gerencia Regional de Recursos Naturales y Gestión Ambiental.
Para la ingeniera Ramos, de Resto Zero, una acción importante para el proceso del cuidado del ambiente es, como un primer paso, el generar menos basura, antes que el reciclar y reutilizar. “Luego está el hecho de saber cómo reutilizar, sobre la base de residuos fáciles de reciclar”, agrega.
Además, no se trata de pensar solo en el futuro de nuestro planeta, sino de tomar acciones desde el presente. Considerando que la dimensión ambiental es un factor clave del desarrollo social y económico, instituciones como el Ministerio del Ambiente enfoca sus acciones en ejes estratégicos como Perú Limpio, Perú Natural y Perú Inclusivo, a través de los cuales se promueve la incorporación de la variable ambiental en las políticas y programas sectoriales y en los diferentes niveles de gobierno.
En esa línea, la especialista Mónica Ramos considera que, aunque vivimos en un contexto bastante complejo, será interesante para los estudiantes “plantearse retos en los cuales puedan utilizar su ingenio e innovación para encontrar una solución”. Y añade: “Yo tengo una mirada optimista de lo que va a ser el futuro. La idea no es abrumarlos, sino identificar los espacios donde pueden ayudar, motivar y alinear poco a poco lo que los preocupa con sus pasiones para contribuir al cuidado del medio ambiente”.
Nota escrita por los corresponsales escolares Tatyana Fernández Olano, Ignacio Sánchez Barrantes, Denisse Sánchez Ruiz, Mariafé Rodríguez Chávez y Manuel Eyzaguirre Montenegro, del colegio Santo Toribio de Mogrovejo, de José Leonardo Ortiz (Lambayeque). Bajo la mentoría de Juan Carlos Fangacio.
