Nuestro país está viviendo una situación adversa a nivel económico debido a la pandemia y las restricciones que ha generado el COVID-19, que implicó que muchos negocios o empresas quebraran y tuvieran que cerrar, dejando a millones en una situación de desempleo.
Por ello, es clave que el gobierno entrante tome medidas y ofrezca facilidades para la reactivación económica. Para tener mayores detalles sobre lo que se debe impulsar durante el próximo quinquenio para que la economía se recupere y fortalezca, conversamos con Yuliño Anastacio, economista y coautor del libro: “La historia fiscal del Perú: 1980-2020. Colapso, estabilización, consolidación y el golpe de la COVID-19”, para conocer más detalles sobre las prioridades a corto, mediano y largo plazo.
“Un punto importante y de lo que han carecido ambos candidatos durante las elecciones es generar predictibilidad. ¿Eso qué significa? En palabras sencillas, es generar confianza en el mercado”, precisa Anastacio.
Para concretar dicha predictibilidad, el economista señala que se deberían evitar propuestas radicales o que afecten la institucionalidad del país, ya que esto generaría una gran incertidumbre en algunos inversionistas o agentes económicos.
“Cuando uno genera desconfianza o bien hace propuestas que no han funcionado en el tiempo -es decir, propuestas trasnochadas-, o cuando se quiere cambiar todo el sistema, -dar propuestas radicales-, sí se pueden tener impactos serios. Esto afecta a la predictibilidad y la confianza que tienen [los agentes] hacia la economía del país. Es muy importante la seguridad que pueden tener los inversionistas para realizar una inversión” añade Anastacio.
EL CAMINO PARA MEJORAR LA ECONOMÍA
Para Anastacio, el gran reto del gobierno entrante para fomentar una mejor economía en el largo plazo es el de encontrar soluciones para la informalidad.
“El primer gran reto que tiene nuestra economía es hacer reformas. ¿Cuáles son las reformas postergadas que tiene nuestra economía? La principal tiene que ver con nuestro mercado de trabajo donde hay muchísima informalidad. Esto es malo porque dice que nuestros trabajadores no tienen seguridad, o no tienen beneficios sociales; es decir, que [el mercado laboral peruano] está compuesto de una gran cantidad de autoempleados”, indica el economista.
Anastacio menciona que la mejor forma de reducir la informalidad es aumentar el PBI de manera sostenible. “La prioridad actualmente son las vacunas y la recuperación económica del Perú. Cuanto más rápido vacunemos a nuestra población, más fácil será volver a acercarnos. Tampoco debemos descuidar a nuestras empresas, ya que esta es una crisis de largo aliento y de mucha incertidumbre. En ese sentido, el auxilio que se le puede dar a las empresas u hogares es importante. El nuevo Gobierno debe de estar monitoreando cómo va la economía en general”, argumenta.
EL ROL DE LAS ENTIDADES
Según Anastacio, el Banco Central de Reserva del Perú es de los mejores de Latinoamérica, ya que en vez de invertir los dólares, los ahorra y está preparado ante una posible crisis.
Sin embargo, si persiste un ambiente de incertidumbre en el país los empresarios van a querer cambiar sus ganancias de soles a dólares y eso generará una gran demanda de esta moneda extranjera, y por ende aumentará el valor del tipo de cambio. “Lastimosamente como hay incertidumbre de quién va a tomar el nuevo gobierno, obviamente, esa incertidumbre se va a pasar al tipo de cambio. Que no te sorprenda que antes del 28 de julio incluso post 28 de julio el dólar, incluso alcance nuevos récords” dijo el economista.