CHRISTIAN CRUZ V. @cruzva_DT
Eduardo Heinrich esperó al Dakar más duro para poder llegar a la meta. El piloto nacional partió en Rosario el pasado 8 de enero y se subió al podio en Valparaíso quince días después, cobrándose la revancha de los dos abandonos de años anteriores. De nueve peruanos, cinco llegaron a la meta, y Heinrich lo hizo con bandera en mano.
¿Te queda la sensación de que le ganaste al Dakar?
La satisfacción es muy grande, sobre todo porque al terminarlo he sentido como si fueran tres Dakar en uno. Era mi tercer Dakar, ya que en los dos primeros no pude acabarlos, y en cada etapa de esta sumaba la de los dos anteriores.
El puesto 45 tampoco es malo...
La satisfacción es doble por eso, porque es el Dakar más duro de los últimos 10 años, según han dicho, y nos fue bien. Dada las condiciones, con el presupuesto limitado con el que he ido, llegar en esa posición es muy satisfactorio. Ha compensado el trabajo de tres años.
¿Dónde sentiste la rudeza del Dakar?
En la tercera etapa ya empecé a sentir lo duro que era. Los caminos eran difíciles y era una etapa maratón. Fueron kilómetros de ruta tipo enduro, luego piedras filosas y sin asistencia. Ahí pensé: “¿Cómo voy a hacer si aún faltan 10 días?”. Pero concluí que hay que ir día a día, a nuestro ritmo, pensando en llegar a la meta.
¿En la Argentina vivieron los peores momentos?
En el quinto día nos terminaron de meter el ‘machete’. Ahí falleció el belga Palante. Hacía mucho calor y eran como 30 km. de desierto muerto. Vi a varios pilotos abandonar y, por otro lado, había humo de la moto de Farrés quemada. Parecía una zona de guerra. Felizmente pasé.
¿Y se piensa en la familia en esos momentos?
La verdad es que pensar en la familia te quita concentración. Tienes tantas horas sobre la moto que el cerebro se cansa de las piedras y demás, y busca pensar en otras cosas. En lo primero que piensas es en la familia y ahí es donde puedes perder. Es mejor no pensar en la familia, porque si te desconcentras quizás después no puedas verla.
¿El proyecto para el 2015 qué incluye?
Yo corro por Honda Perú y la idea es poder correr el Dakar 2015 en una moto como las del equipo oficial HRC (Honda Racing Company). Esa moto fuera de pista corre a 170 kilómetros, mientras que la mía solo va a 140. Esa ya es una gran diferencia. Con una buena moto, buena asistencia se puede estar en el top 20.
Y mejorará si el rally pasa por el Perú.
Claro. A Etienne Lavigne le pregunté si venía por el Perú y solo me dijo: “Tú tranquilo. Ahora disfruta que ya acabaste el Dakar que ya habrá noticias”. Yo confío en que regrese porque eso nos ayudaría mucho a todos los pilotos respecto a nuestros auspicios. Nosotros igual estaremos.