Belo Horizonte (Reuters). La selección brasileña de fútbol volvió a mostrar el sábado una pálida imagen y necesitó de la definición por penales para vencer a Chile y pasar a los cuartos de final del Mundial 2014.
Tras el 1-1 de los 90 minutos reglamentarios y el alargue, el local se impuso por 3-2 en los penales, con una gran actuación de su golero Julio Cesar, que contuvo dos remates.
Brasil abrió el marcador a los 18 minutos por intermedio del defensor David Luiz, pero Chile empató a los 32 a través del delantero Alexis Sánchez y la igualdad se mantuvo hasta el final del encuentro.
En los 30 minutos de alargue ambos equipos sintieron el cansancio por el esfuerzo bajo un intenso calor y el marcador se mantuvo 1-1 para pasar a la tanda de cinco penales por equipo pese a que los dos conjuntos mostraron intenciones ofensivas hasta el final.
El equipo de Chile incluso tuvo la posibilidad de ganar a los 120 minutos con un remate de Mauricio Pinilla que pegó en el travesaño.
El partido en el estadio Mineirao de Belo Horizonte fue dirigido por el árbitro inglés Howard Webb y presenciado, según FIFA, por 57.714 espectadores, con mayoría de hinchas locales
