El equipo alemán trabajó hoy a puerta cerrada y con siete jugadores resfriados. El técnico Joachim Low explicó que los futbolistas tienen "dolor de garganta" y lo atribuyó a las diferencias de temperatura y el aire acondicionado. Esto a poco del partido contra Francia el viernes por los cuartos del Mundial Brasil 2014.
"Tienen una gripe leve. Por el momento no es tan grave, no quiero dramatizar" señaló el técnico a la radio pública alemana. En octavos de final, ante Argelia, Mats Hummels tuvo que perderse el encuentro por una gripe, mientras que Lukas Podolski estuvo ausente por una distensión muscular. A pesar de esto, Andreas Kopke, asistente de Löw, afirmó que 22 de los 23 jugadores están en condiciones para jugar. La única excepción es Mustafi, quien sufrió un desgarro y se perderá el resto del torneo.
El cuerpo técnico debate la posibilidad de devolverle al capitán Phillip Lahm su rol de defensor, quien estuvo mostrando dudas poco habituales en el mediocampo. Ante Francia, Löw podría poner de inicio a André Schurrle, quien revolucionó el equipo al entrar en la parte complementaria frente Argelia. Declaró hoy que está en buena forma y con muchas ganas.
Por su parte, los galos Sakho y Matuidi elogiaron a la selección alemana, próximo rival de cuartos de final en Rio de Janeiro. "Es un equipo fantástico" y "es una selección muy fuerte en todos los sectores" declararon respectivamente. Sin embargo ambos se mostraron seguros de poder derrotar a los dirigidos por Löw: "también somos muy fuertes y tenemos mucha confianza".