En el lejano pueblo de Llacuabamba, que se ubica a quince horas en auto desde Trujillo, y se encuentra en el departamento de La Libertad, no se durmió ayer. Todo fue fiesta y festejo. ¿La razón? el Deportivo Llacuabamba, el club más popular de esa zona del país, empató 2-2 ante Carlos Stein FC y se proclamó flamante campeón de la Copa Perú 2019. Con esto, se convirtió en el nuevo inquilino de la próxima temporada de la Liga 1.
El conjunto celeste, que será el tercer representante de La Libertad en el torneo profesional del fútbol peruano para la temporada 2020, empató en puntos con su rival de turno al término del certamen, pero la diferencia de goles le terminó otorgando el trofeo.
Carlos León abrió el marcador para Stein a los 34 minutos. Sin embargo, el conjunto dirigido por Roberto Tristán volteó el encuentro a través de Álex Valera (49’) y Guillermo Vernal (82’). Sobre el final, Danny Peralta le puso suspenso al duelo tras marcar el 2-2 (88’). El cuadro chiclayano jugará el cuadrangular que otorgará las últimas dos plazas para ascender a Primera.
—Un equipo que vale oro—
Deportivo Llacuabamba fue formado por una comunidad minera que está ubicada en el distrito de Parcoy, provincia de Pataz. El club clasificó a la etapa nacional como subcampeón de La Libertad. Llama la atención que fueron los mismos pobladores de Llacuabamba los que pagaron la campaña de su equipo. Hace unas semanas, Hernán Saavedra, su presidente, aseguró que si “el precio del oro no baja pueden jugar hasta la Copa Libertadores”.
Uno de los objetivos será ampliar la capacidad del estadio Municipal, en donde juegan de local. Buscan que su recinto reciba 8 mil espectadores. Dentro del plantel destacan algunos jugadores con experiencia en Primera como Segundo Acevedo (ex Aurich y Mannucci), Felix Uculmana (ex Sport Huancayo), y Jorge Esparza (ex Universitario). Una mención aparte merece Javier Trauco, primo del seleccionado nacional Miguel Trauco.