"Nuestras alineaciones son sólo blancas", la terrible amenaza de los ultras rusos que frenaron un fichaje

Han pasado menos de dos semanas desde que terminó el Mundial Rusia 2018, que tan buen desarrollo tuvo y que dejó una imagen de un país tolerante y respetuoso sobre el racismo, y ya se reportó un incidente sobre discriminación.

Se trata del jugador Erving Joe Botaka-Ioboma, deportista ruso de ascendencia congoleña. El futbolista de 19 años fue fichado por el Torpedo de Moscú, pero la directiva, por la presión de sus hinchas, desistió de la contratación.

"Solo queremos blancos en nuestras filas", publicó la facción más brava del Torpedo denominada Zapad-5 Ultras. Ellos pidieron la anulación inmediata del contrato. El club, de la tercera división del fútbol de Rusia, informó que había desistido de la adquisición de Erving Botaka por problemas económicos.

Las reacciones en Rusia no se hicieron esperar y uno de los primeros en levantarse fue el periodista Artur Petrosyan. El profesional de la comunicación se manifestó con enfado: "Es una vergüenza. Increíble, sí estamos en el 2018", expresó. El presidente de la Unión de futbolistas rusos, Alexander Zotov, también elevó su voz de protesta y tildó los comentarios de los ultras de "idiotas", aunque aclaró que este es un tema que sucede en todos los países y no sólo en Rusia.

El club Torpedo de Moscú respondió diciendo que para ellos "el color de la piel nunca ha sido un criterio al seleccionar un jugador".

"En nuestra política de selección de jugadores, nos adherimos por completo a los principios deportivos, compartiendo valores humanos comunes. Una vez más, afirmamos que el color de la piel nunca fue un criterio al seleccionar un jugador para el club. El racismo no tiene derecho a existir. Nos adherimos a este punto de vista. En la situación con la transferencia fallida de Erving Botaki, la cuestión del pago de la indemnización fue decisiva", afirmó el Torpedo de la tercera división de Rusia.

Rusia es un país que ha sido multado por muestras de racismo. La última sanción fue en mayo de este año. La FIFA multó a la Federación Rusa con 25.000 euros por los comentarios y gritos racistas de la barra contra Francia durante un cotejo amistoso de marzo.

Pero el hecho que causó más enfado, y abrió abiertamente la polémica sobre el racismo en Rusia, sucedió en el 2015. Durante un partido entre el Spartak de Moscú y el Ufa de la Liga rusa. Los hinchas del Spartak simularon gritos de mono cada vez que Emmanuel Frimpong tocaba el balón. El futbolista del Ufa respondió con un gesto, el árbitro lo expulsó y le dieron dos partidos como sanción.