El atacante del Real Madrid Ángel Di María ofreció a la prensa argentina su versión sobre el gesto polémico que realizó en el partido de ayer. “Yo aguanto los silbidos, no hice ningún gesto para nadie, simplemente me acomodé”, declaró en Fox Sports Radio.
Posteriormente, en Radio La Red, dijo que se siente señalado: “Si lo hace otro, ese gesto pasa de largo. Si lo hago yo, es tapa de los diarios”, afirmó. Felizmente para sus intereses, el entrenador Carlo Ancelotti le restó importancia al asunto y el defensa Sergio Ramos se lo tomó con humor.
El volante señaló a la prensa de España como la culpable de su actual situación en el Real Madrid. “Quizás la prensa de España no me quiera porque no soy de dar entrevistas”, aseguró, para añadir: “Quieren ponerme a la gente y al club en contra. Siempre están esperando que haga algo para poder matarme”.
También culpó a la prensa de la marcha del atacante Gonzalo Higuaín al Napoli de Italia: “Higuaín hacia 20 ó 30 goles por temporada y vivían diciendo que se tenía que ir. En junio, cuando se dijo que me querían vender, tuvo que hablar Cristiano para que no lo hicieran”, dijo.
Sobre su “gesto”, negó que fuera una provocación: “Mi familia estaba en el estadio, no voy a hacer ese gesto con ellos allí”. Además, mandó un nuevo recado a los medios: “A mí me encanta jugar, ayudar al equipo y no hablar con la prensa. Aquí soy feliz, tengo el apoyo de mis compañeros y del técnico Ancelotti”, aseveró.