Emoción a flor de piel. Así vivió Ronald Araujo la ceremonia organizada por Barcelona para que el futbolista firme el nuevo contrato que le vincula con el club hasta junio del 2026. Desde la cancha del Camp Nou, el defensor inició un discurso en el que mencionó a su familia, quienes le acompañaron en la especial jornada.
Mientras pronunció las primeras palabras, el uruguayo recordó todo lo que vivió para llegar a uno de los momentos más importantes de su carrera con apenas 23 años. Por ello, el zaguero no pudo contener las lágrimas por todas las sensaciones que experimentó en aquel instante. Enseguida, tras el silencio, hubo una ovación por parte de los invitados.
“Es una felicidad enorme, estar en este club, el mejor del mundo”, inició. “Quiero agradecer a Dios, en primer lugar, por esta oportunidad, por seguir acá, es tremendo. También a mi familia, que siempre me apoyó desde un principio, a mis padres, a mi mujer”, agregó y se empezó a quebrar su voz. “Me emociono un poco porque pasamos por muchas cosas y …”, derramó unas lágrimas y, de fondo, los aplausos para animarle.
“Trabajamos mucho para llegar a Europa. Estar en el Barça es una felicidad. Nunca lo dudé, siempre tuve claro que mi lugar es este. Creo mucho en el proyecto y creo que nos levantaremos y ganaremos muchos títulos”, añadió Ronald Araujo, que llegó en 2018 procedente del Boston River, a cambio de 5,2 millones de euros.
La decisión de Araujo
Tras semanas de negociación, Araujo continuará cuatro años más en el Barça, una decisión que tomó después de hablar con personas como Xavi Hernández, Sergio Busquets o su compatriota Luis Suárez, según reconoció posteriormente en declaraciones a los medios de comunicación del club.
“Estaba tranquilo y seguro de lo que tenía. Es verdad que había ofertas importantes de fuera, pero yo lo tenía claro. El ruido era de fuera. En dos reuniones lo arreglamos, llegamos a un acuerdo rápido. Siempre pensé en quedarme, nunca pensé en irme”, precisó.
El central de Rivera afirmó que todavía puede crecer como futbolista y destacó que desde la llegada de Xavi Hernández como técnico aprendió “mucho” para adaptarse al “estilo” del Barcelona.
“Quizás en los últimos años se perdió un poco el estilo, lo que identificó al Barça, como dice Xavi. A mí me pasó todo muy rápido, vengo de otro estilo de juego. Pero con trabajo lo pude lograr y creo que puedo ir a más cada vez”, reflexionó.