Solo estuvo 61 minutos en la cancha, pero fueron suficientes para que Cristiano Ronaldo dejara su marca goleadora en el arco del Osasuna. Un disparo de tiro libre que contó con la complicidad del portero Andrés Fernández –un verdadero blooper- terminó por romper su racha negativa de dos partidos sin marcar (ante el Osasuna en la ida de los octavos de la Copa del Rey y ante el Espanyol por la Liga Española).
Sin esforzarse a fondo, ‘CR7’ comandó el ataque del Real Madrid rodeado por la juventud de Isco y Jesé. Su sola presencia generó tanto temor en el cuadro local que no tuvo cabeza para pensar en inquietar a Iker Casillas.
El portugués, con su temida pegada, decretó a los 22 minutos el primer tanto del cuadro madridista. Su potente disparo desde 25 metros no pudo ser detenido por Fernández, a quien se le escurrió el balón entre las piernas.
Cristiano estrenó su Balón de Oro con gol y ya suma tres conquistas en cuatro partidos disputados este 2014. Pero lo más increíble es que mantiene su estupenda racha goleadora: 30 tantos en esta temporada 2013-14, un buen arranque para soñar con otro año feliz, con la posibilidad de retener el título de mejor jugador del mundo.