DIEGO BARRIO DE MENDOZA
El Barcelona sufrió hoy su cuarta derrota en la Liga española y la segunda consecutiva fuera de casa. El resultado dejó a los dirigidos por Gerardo Martino a un punto de líder Real Madrid, que mañana podría ampliar su ventaja a cuatro unidades si gana a Levante en el Bernabéu. El Atlético de Madrid, por su parte, venció al Celta de Vigo y mandó al conjunto culé a la tercera posición. A continuación cuatro razones de la crisis actual del conjunto azulgrana.
1. La renuncia del presidente por el caso Neymar. Sandro Rosell renunció a la presidencia del Barcelona el 23 de enero y dejó a cargo a Josep Maria Bartomeu hasta 2016. Después de las dudas y acusaciones que surgieron a partir el fichaje de Neymar, el principal motivo de alejamiento de Rosell, el Barza pagó 13,5 millones a Hacienda. La crisis institucional de un club sin duda afecta el desempeño del mismo en el ámbito deportivo, sobre todo cuando un jugador “estrella” es causa del detonante.
2. Cambio de entrenador. Gerardo Martino ha demostrado ser un profesional capacitado al hacer un Mundial 2010 más que satisfactorio con Paraguay, triunfar en la Liga argentina con Newell’s, entre otros logros. Sin embargo, no es un entrenador propio de las raíces del Barcelona como sí lo son Tito Villanova, Pep Guardiola y Frank Rijkaard, holandés que no jugó en el Barza, pero conoce a la perfección la filosofía de Rinus Michels y Johan Cruyff, pioneros del estilo actual culé. Los tres técnicos nombrados, que comparten identidad, marcaron el éxito que tuvo el club del 2008 al 2013.
3. Las figuras no son las mismas. En 2009, cuando el Barcelona ganó la triple corona (Champions, Liga y Copa) y sorprendió al mundo del fútbol con un estilo deslumbrante, Xavi e Iniesta tenían 29 y 24 años respectivamente. Los mediocampistas fueron el principal motor de un equipo que funcionó a la perfección; pero ahora, con 34 y 29 años, y el de Terraza pensando ya en su retirada, su rendimiento no es el mismo y menos aún su estado físico. Ahora el equipo culé ya no es tan colectivo y depende más de la brillantez de su figura Lionel Messi, cuestión que no es tan saludable.
4. La defensa. El capitán Carles Puyol, defensor que fue un pilar en épocas gloriosas, anunció que se va del club porque las lesiones no lo dejan en paz. ‘Tarzán’ es el “ángel guardián” de Gerard Piqué, ya que lo supo orientar por el camino de los grandes centrales. Sin embargo, esta temporada, debido a la ausencia de Puyol y otros motivos personales, Piqué ha disminuido su nivel considerablemente. Además, los laterales titulares Dani Alves y Jordi Alba son ofensivamente capaces y agresivos, pero comparten el descuido por el aspecto defensivo. Si no fuera por la sacrificada tarea de Javier Mascherano, el destino del Barcelona en la Liga quizás hubiera sido atroz.