Tras una primera parte sin goles en el Camp Nou, Barcelona consiguió marcar en el inicio del complemento de su primer partido por LaLiga sin Ronald Koeman. Memphis Depay se lució con un golazo y puso 1-0 a los azulgranas.
Antes del descanso, Sergio Agüero dio un susto al Camp Nou al estirarse en el suelo tras mostrar síntomas de mareo. El argentino se fue andando del campo y fue trasladado a un centro hospitalario para someterse a exámenes médicos.
La magia perdida regresó a los pies de Memphis y nada más empezar el segundo tiempo, en el 49, su pie derecho se inventó un disparo en forma de parábola que se incrustó en la escuadra izquierda de Sivera. El Camp Nou se liberó y el neerlandés lo celebró con su gesto característico de taparse los oídos.
Pero la alegría azulgrana tan solo duró tres minutos. Los que tardó Luis Rioja en perforar el centro de la defensa del Barça, muy blanda, con una jugada individual en la que se apoyó en Joselu antes de driblar a Ter Stegen y marcar a puerta vacía.
El gol visitante enrabietó a los de Barjuan, que se sobrepusieron al golpe en un primer momento y tuvieron en los pies de Memphis dos ocasiones muy claras para hacer el segundo tanto. En la primera le asistió Gavi y el balón se estrelló en el palo derecho tras picarla por encima de Sivera y, en la segunda, fue Nico González quien le dejó solo ante el portero visitante, que repelió la pelota.
Tanto Gerard Piqué como Edgar Méndez abandonaron el campo con molestias musculares y, copiando el primer tiempo, el ritmo de juego decayó en detrimento de los intereses azulgranas. La última carta de Barjuan fue dar entrada a Alejandro Balde y al debutante Ez Abde a 10 minutos del final. Aportaron energía y atrevimiento, pero el resultado ya no se movió.