El Liverpool ganó en los últimos instantes de la prórroga por 1-0 al Chelsea, este domingo en Wembley, y conquistó así la Copa de la Liga inglesa, el primer trofeo para los ‘Reds’ desde 2022.
El defensa neerlandés Virgil Van Dijk, de cabeza en un saque de esquina cuando todo el mundo pensaba ya en la tanda de penales, decidió la final en el minuto 118 y permite al Liverpool soñar con acabar la temporada con un póker de títulos, ya que el actual líder de la Premier League aspira también a coronarse en la Europa League y la Copa de Inglaterra.
Van Dijk se sacó así la espina del gol que había anotado, igualmente de cabeza, hacia la hora de partido, pero que fue anulado tras la revisión en vídeo por fuera de juego de un compañero.
“Hemos cumplido la misión, pese a todos los problemas que hemos tenido. Estoy muy orgulloso de mi equipo, todos hemos sabido cumplir con nuestro papel”, declaró Van Dijk a Sky Sports.