Golpe por golpe a lo largo del segundo tiempo del Liverpool vs. Manchester City en el estadio de Anfield. Luego del tanto del conjunto liderado por Jürgen Klopp, apareció en escena Kevin De Bruyne para marcar el 2-2 a poco del pitazo final en el compromiso de la séptima jornada de la Premier League.
La jugada nació en la cancha del elenco entrenado por Pep Guardiola. Antes de cruzar la línea que divide el terreno, Bernardo Silva se apoyó con el mediocampista belga en el círculo central. Enseguida, el jugador del combinado ‘sky blue’ invadió el terreno contrario y luego sacó un pase largo hacia la punta izquierda.
Phil Foden, que marcó el 1-1 transitorio, controló en ese sector de la cancha. El atacante inglés enfrentó al zaguero Joe Gomez, pero sacó un servicio hacia el centro. Kyle Walker intentó sacar un remate, pero no logró conectar. Es más, Andrew Robertson se cruzó en el camino y hubo un ligero desvío en uno de sus pies.
Así, la pelota quedó suelta en el área grande. Ello fue aprovechado por De Bruyne que partió desde la media luna y golpeó el globo con precisión directo al segundo palo. Tuvo suerte el hombre de Manchester City porque el balón impactó en el cuerpo de Joel Matip dejó mal parado al arquero Alisson Becker.
Sin opciones de atajar, el brasileño solamente vio cómo la portería cayó por segunda vez en la etapa complementaria del choque que cierra la fecha en el fútbol inglés y marcará la pausa de casi 15 días en lo que se disputará encuentros de selecciones nacionales en las Eliminatorias a la próxima Copa del Mundo.