En la última fecha del Brasileirao Leandro Damiao demostró no ser muy amigo del juego limpio. En el encuentro en el que su club, el Santos, perdió 3-0 frente al Criciúma el delantero captó la atención de las cámares por una escena inusual.
En un tiro de esquina en favor del Santos, Damiao intentó sorprender al árbitro del cotejo simulando una falta dentro del área rival. Lo curioso de la acción fue que el propio delantero, mientras corría en dirección al balón, se jaló la camiseta para que el juez cobrara penal. La jugada pasó desapercibida para el réferi más no para la prensa que crítico al futbolista.
Tras el duelo y consultado sobre el singular hecho, Damiao dijo lo siguiente: “Nunca he tenido problemas de ése tipo. Se trataba de una jugada normal, pero tenía la camiseta muy apretada al cuerpo”.
En tanto, Enderson Moreira, técnico del Santos, reprobó la acción. “Condeno cualquier tipo de situación como ésa. Ya es difícil arbitrar un partido. La gente debe colaborar con el fútbol limpio para merecer volver a ganar”, señaló.