Parecía que Juventus se iba a ir al descanso con la ventaja, pero Ruslan Malinovskyi no lo quiso así. El ucraniano se encargó de anotar gol para Atalanta y firmó así el empate en la final de la Copa Italia, duelo por el título que se lleva a cabo en el MAPEI Stadium.
Sobre los 41 minutos del primer tiempo, el mediocampista ucraniano no dudó para rematar entrando al área y venció la resistencia del experimentado Gianluigi Buffon. Diez minutos antes, el sueco Dejan Kulusevski abrió la cuenta para la Juventus.
De poder a poder
Tras haber fracasado en la final en 2019 contra la Lazio (0-2), Gasperini, técnico de Atalanta, tiene la ocasión de abrir su palmarés personal y sobre todo inscribir en la historia del fútbol italiano a esta ‘Dea’ a la que ha llevado desde hace tres años a niveles inéditos, seduciendo, marcando y ganando.
Atalanta está calificada por tercera vez consecutiva a la Champions y puede lograr el domingo le mejor posición final de su historia en Serie A (2ª). Solo le falta un título.
Pirlo, por su parte, puede ganar su segundo trofeo como (joven) entrenador, tras la Supercopa de Italia en enero contra Nápoles (2-0).
Pero el eventual título para los ‘Bianconeri’ (13 copas de Italia en su palmarés) no hará evidentemente olvidar el recorrido fallido en Liga de Campeones (eliminación en octavos contra el Oporto), ni el ‘Scudetto’ cedido al Inter de Milán, tras un reinado de nueve títulos consecutivos.
Con información de AFP.
