Marco Quilca León

El zurdazo de Olga Carmona al minuto 29 abrió las puertas de la eternidad para España, el país que hoy por hoy domina el fútbol femenino. Con un ajustado 1-0, la ‘Roja’ se impuso ante Inglaterra para ganar el Mundial femenino y consagrarse como la única selección femenina en ser campeona del mundo en todas las categorías: en el 2022 logró el título en la Sub 17 y Sub 20.

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Y lo hizo con Carmona como heroína, que tras levantar el título se enteró de que su padre había fallecido horas antes. Paradójicamente, celebró su gol señalando al cielo dedicando su tanto a la madre de una amiga.

El título no deja de sorprender. Primero porque el torneo se posicionó —para los expertos— como el más parejo de todos los organizados hasta ahora: todas las selecciones que alguna vez fueron campeonas se fueron antes de semifinales. Y hubo espacio para las sorpresas como Colombia, que promete un futuro esperanzador liderado por el talento de Linda Caicedo.

Segundo porque España supo renacer desde las cenizas. Hace algunos meses, quince futbolistas renunciaron a la selección por no estar de acuerdo con el técnico Jorge Vilda, hoy campeón del mundo. Luego doce de ellas decidieron volver y el técnico convocó a tres: Ona Batlle, Aitana Bonmati y Mariona Caldentey. Ellas celebran un hito tan grande como lo conseguido en Sudáfrica 2010 gracias a Iniesta.

El secreto

Que hoy España reine en el mundo del fútbol femenino no solo es gracias al talento innato de sus jugadoras ni de sus constantes luchas. Lo que hizo Jorge Vilda a poco del Mundial fue fundamental.

Antes de incluso dar la lista de convocadas, el técnico decidió organizar una fiesta de confraternidad. Entonces el vestuario pasó de tener algunas heridas abiertas a ser un ambiente de camaradería. Y luego empezó el trabajo.


Vilda y su cuerpo técnico prepararon entrenamientos cortos, pero intensos. Ejercicios en grupos. Y enfatizaron en el videoanálisis, para observar falencias y para analizar a los rivales. Hoy España recoge el fruto de un trabajo serio y domina el mundo.