Cuando faltaba un minuto para el término del encuentro entre el Marsella y Montpellier, el árbitro del encuentro decidió suspender el partido debido a que los hinchas empezaron a lanzar objetos. El juez del encuentro ya había advertido, pero al repetirse, se fue a los camerinos.
Los jugadores de ambos equipos se quedaron en el campo de juego sin saber si el partido iba a continuar y tras ciez largos minutos de espera, el árbitro retornó y el encuentro se volvió a jugar. El marcador no se movió y el Marsella venció por 3-2.
El jugador del Marsella, Valentin Rongier, suplente, había recibido el impacto de una botella tras el gol de Dimitri Payet que puso a su equipo por delante (3-2) en el minuto 79 del partido.
El Marsella, invicto en pretemporada, mantiene su buen momento con un triunfo. Ni siquiera verse con un 2-0 en contra en el primer tiempo cambió el buen juego de los marselleses, que encontraron su recompensa con dos goles de Payet (75, 80), que se sumaron al gol previo del fichaje turco Cengiz Under (68).
“Tenemos que seguir con la idea de representar a Marsella. Está bien ganar en Montpellier, una cancha muy difícil, pero me quedo más con la forma que con el resultado”, indicó Jorge Sampaoli al término del partido.
El próximo encuentro del Marsella en la Ligue 1 será ante el Bordeaux el 15 de agosto. El Marsella no pierde un partido desde el 9 de mayo, aquella vez cayó 1-0 ante el Saint-Etienne.