Pessotto: “Estuve a 30 segundos de ser campeón de Europa”
Pessotto: “Estuve a 30 segundos de ser campeón de Europa”
Renzo Giner Vásquez

Seis títulos de la Serie A italiana, tres Supercopas de Italia, una Champions League, una Supercopa de Europa, una Copa Intercontinental y hasta una desaparecida Copa Intertoto, todas forman parte del palmarés de Gianluca Pessotto, quien visitó Lima el fin de semana para impulsar La Gran Oportunidad, una iniciativa de FOX Sports y la Juventus que busca aportar con la formación de jóvenes futbolistas. “La idea es que los chicos puedan vivir la experiencia Juventus con diversión y alegría”, explica.

— ¿Cuáles son los planes de la Juventus en el Perú?
Estamos aquí para algo formativo. Nosotros no queremos solo futbolistas, formamos personas. No vendemos ilusiones, transmitimos una metodología. Tenemos una forma de enseñar fútbol, pero sobre todo de formar personas.

— ¿Qué diferencia al jugador de Juventus?
El profesionalismo. Confiamos que con el fútbol podemos formar adultos de bien.

— Durante mucho tiempo fue titular en la defensa de la Juventus. ¿Cuán complicado fue llegar a eso?
Fue bastante duro y requirió ir paso a paso. Comencé en las divisiones inferiores del AC Milan,  donde llegué a los 13 años,  jugué segunda y tercera división, hasta que llegué a Turín. La ‘Juve’ es un modo de vivir, te transmite muchos valores, exige que estés siempre en un alto nivel profesional, muy fuerte, muy competitivo y, además, estás rodeado de grandes jugadores.

— Como Alessandro del Piero o Fabio Cannavaro. ¿Cómo era compartir vestuarios con ellos?
Todo un privilegio. Cuando empiezas en ese equipo tienes referencia de grandes jugadores. Tú has mencionado a Del Piero y Cannavaro, pero también podríamos hablar de Zidane, Trezeguet, Vialli, Peruzzi, Buffon, Montero, Salas. Cuando conoces a esos jugadores notas que tienen una mentalidad de alto profesionalismo, piensan como campeones. Qué mejor que aprender de ellos.

— ¿Puede contarnos alguna anécdota de ese camerino? 
Las más divertidas no se pueden contar [risas].  

— Debe haber una…
Algo que hacíamos era que cuando uno se vestía mal, sin estilo, le cortaban la ropa y así nunca más la usaría [risas]. Había otras veces en las que las colgaban en los ventiladores que están en los techos y las dejaban ahí girando. La idea era asegurarse de que no lo vuelva a usar. 

— Mencionó su paso por las divisiones inferiores del Milan, pero su debut fue en 1989 en el Varese. ¿Qué recuerda de esos tiempos?
Sí. Tenía 19 años. Fue un momento muy importante y mi primer contacto con el fútbol de mayores, pese a que era cuarta división. Recuerdo que desde entonces mi objetivo era llegar bastante alto. Pese a que era joven no tenía miedo a enfrentarme a jugadores de 30 años, mucho más fuertes físicamente que yo. Era importante pensar a dónde debía llegar. 

— Y llegó a la selección italiana…
Vestir la camiseta de tu selección es el máximo logro de cualquier jugador. Pude jugar el Mundial del 98 y fue bellísimo, pura emoción, se vive una atmósfera única. Cuando estás en la cancha y escuchas el himno de tu país es algo muy emocionante.


El equipo italiano que participó de la Euro Bélgica-Holanda 2000. Pessotto aparece sentado, a la izquierda, en la fila delantera. (AP)

El equipo italiano que participó de la Euro Bélgica-Holanda 2000. Pessotto aparece sentado, a la izquierda, en la fila delantera. (AP)

— También estuvo en la Eurocopa del 2000…
Fue una emoción y una tristeza muy grande a la vez. Eliminamos a Holanda [local] en semifinales después de la tanda de penales. Pero en la final terminamos bastante tristes, estuvimos a 30 segundos de ser campeones. Finalmente ese es el fútbol.


Luigi Di Biagio, Fabio Cannavaro, Alessandro Del Piero y Gianluca Pessotto celebran el triunfo sobre Holanda en las semifinales de la Euro 2000. (AP)
 

Luigi Di Biagio, Fabio Cannavaro, Alessandro Del Piero y Gianluca Pessotto celebran el triunfo sobre Holanda en las semifinales de la Euro 2000. (AP)

— En esa final usted le dio la asistencia a Marco Delvecchio. ¿Fue su partido más importante?
Con la selección sí. Hasta un punto creíamos que ya habíamos ganado [anotaron el 1-0 en el minuto 55. Francia volteó el partido con goles a los 94’ y 103’].

— No logró campeonar con la selección pero con el club le fue bastante bien...
Formé parte de un grupo que estaba a un nivel muy competitivo y cuando juegas con un equipo así tienes muchas oportunidades. Ganamos la Champions League del 96, estuvimos en las finales del 97 y 98.  La ‘Juve’ es el equipo más importante de Italia y de los mejores de Europa

— Entre el equipo del 96 y el de ahora, ¿cuál escogería? 
[Risas] Cada jugador tiene su época, el equipo de entonces y el de ahora tienen su propia historia. La Juventus de hoy es muy fuerte en Italia, en Europa, es parte de su historia.

— ¿Y el partido que más recuerda con su equipo?
La final de la Champions contra el Ajax en Roma. De niño sueñas con levantar la Champions, con jugar en el estadio nacional y en este caso fue con penales. Es la emoción máxima. Fue bellísimo. 

— ¿Qué pasa por su cabeza en un partido así?
Es el tipo de partidos que sueñas jugar cuando comienzas en el fútbol. En un momento no escuchas nada, no te preocupa el resultado, solo quieres jugar. El fútbol no se juega por el resultado, se juega por la pasión. 

— En el 2006 atravesó el momento más difícil de su vida, intentó suicidarse...
Quisiera hablarlo solo de forma general. Lo que me gustaría dejar en claro es que el futbolista es también una persona. Muchas veces se tiene la impresión de que el jugador de fútbol no tiene sentimientos o momentos positivos y negativos y no es así. Esto ocurre, uno debe avanzar. 

— Tras enterarse, sus compañeros de selección le dedicaron una banderola con la frase “Pessottino siamo con te” (Pessotito estamos contigo).
Fue muy emocionante, representó lo que todo el mundo del fútbol hizo por mí.


Fabio Cannavaro y Gianluca Zambrotta sostienen la banderola dedicada a Pessotto. (AFP)
 

Fabio Cannavaro y Gianluca Zambrotta sostienen la banderola dedicada a Pessotto. (AFP)

— Ahora es dirigente, ¿es más complicado? 
Muy difícil. Ya no eres el protagonista en el campo. Pero debes transmitirles muchas cosas a los más jóvenes. Por eso elegí ser dirigente y no entrenador, con este trabajo ves un resultado en los más jóvenes. Pero igual es difícil. Siempre he sido un jugador callado, que prefería jugar; ahora es todo lo contrario, debo hablar mucho y jugar poco [risas].

— Si pudiera volver y jugar un último partido, ¿contra qué equipo sería?
[Piensa] El Real Madrid. Siempre hemos tenido muy buenos partidos. 

Contenido sugerido

Contenido GEC