Rio Ferdinand, el legendario excentral del Manchester United, tuvo que pasar por un ritual de 'iniciación' en su nuevo club, Queens Park Rangers. A sus 35 años, sin complejos y con muy buen humor, se paró frente a todos, tomó una botella vacía y empezó a cantar.
Ganador de 6 Premier Leagues y una Liga de Campeones, el defensa central no se escapó del ritual del club, a pesar de ser considerado una leyenda en Inglaterra tras militar en el club de los 'diablos rojos' por 12 temporadas.