París (EFE). Sergio Ramos no quiere entrar en polémicas con su compañero Cristiano Ronaldo, aunque en los últimos días los dos tuvieron opiniones diferentes sobre la política de fichajes del Real Madrid.
Si el portugués aseguró que si fuera él quien mandara en el club blanco hubiera actuado de forma diferente con las salidas de Xabi Alonso y Ángel Di María, Ramos indicó a su llegada a la concentración de la selección española que los jugadores tienen que "regirse por las leyes del club".
"Lo habrá malinterpretado quien quiera malinterpretarlo. Yo no he intentado mandar ningún mensaje a Cristiano y menos a través de la prensa, no lo necesito, es un gran amigo mío y si tengo que decirle algo se lo digo directamente. El club toma decisiones y hay que respetarlo", aseguró el defensor.
Para muchos, una polémica entre ambos, pero el sevillano quiso dejar claras las cosas en la previa del duelo amistoso que mañana sostendrán España y Francia en París.