Para enfrentar a Binacional, Sao Paulo no llegará a Lima, sino que viajará desde Brasil a la ciudad de Santa Cruz (Bolivia) para luego dirigirse a Juliaca. Para esta edición, el equipo de Dani Alves tendrá que superar el durísimo escollo que es jugar a 3825 metros sobre el nivel de mar en un partido frente al campeón peruana, que tratará hacer valer su localía y conseguir su primer triunfo en la Copa Libertadores.
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No obstante, tomando el caso del equipo ‘Tricolor’, Sao Paulo no ha dejado de lado ningún detalle y ha preparado toda la logística desde hace más de 30 días. ¿Cómo? Trabajando con un grupo de especialistas médicos y deportivos.
Luego de derrotar (2-1) a Ponte Preta por el Torneo Paulista, el plantel comandado por Fernando Díniz, se metió en lo que será su debut copero ante ‘El Poderoso del Sur’.
Como parte de las prácticas que realizaron los arqueros, un hecho singular llamó particularmente la atención: los guardametas estaban entrenando con pelotas de vóley. ¿La razón? Simular los efectos que realizan los esféricos en altura.
El objetivo principal es para que los arqueros vayan acostumbrándose a todos los posibles cambios de trayectoria y velocidad que podía sufrir el balón en Juliaca. Teniendo en cuenta que las pelotas de vóley son más ligeras, estas tienen menos resistencia a la presión, algo similar a lo que podría ocurrir este jueves en el estadio Guillermo Rosamedina.