La última vez que una árbitro mujer pisó una cancha en el fútbol peruano, no fue en un partido completo o como juez principal. Sucedió el 3 de diciembre de 2017 en Matute, a pocos segundos de que Alianza Lima se quede con el título nacional. Roberto Mauro hizo ingresar a Silvia Reyes, cuarta jueza, para que pite el final del partido. Con 17 años de trayectoria, esa tarde culminaba su carrera como una de las máximas referentes en el rubro femenino de nuestro país.
Contenido sugerido
Contenido GEC