Para ser abril del 2021, en el que ya se conoce las virtudes de Roberto Mosquera y las carencias de Ángel Comizzo, es sorpresivo cómo se terminó planteando el Universitario vs. Sporting Cristal de la fecha 5 de la Liga 1. Si los celestes venían del tropezón de jugarle de igual a igual a Sao Paulo en la Copa Libertadores 2021, y los cremas de aguantar cerca a su arco hasta encontrarse con la posibilidad de arañar con rebeldía un empate ante Palmeiras, en el torneo local se invirtieron los papeles. Ganaron los rimenses, sí, pero el que mostró mejorías fue el cuadro merengue.
Cristal no pudo jugar pensando solo en el presente. El partido del jueves en el Cilindro de Avellaneda contra Racing estuvo entre las primeras decisiones técnicas, por eso, de saque, se guardó a Washington Corozo, Irven Ávila y Nilson Loyola en el banco. Tampoco es que Alejandro Hohberg y Christopher Olivares no tengan suficientes credenciales, pero a la larga mostraron menos contundencia que en partidos anteriores (11 goles en 4 duelos).
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Ponerse arriba en el marcador fue el mejor negocio para los bajopontinos, porque así se replegaron en su campo y buscaron rematar con contraataques. Sin embargo, entregarle la posesión del balón a la ‘U’ para verlo tropezar en sus intentos de peligro pudo salir caro, ya que el empate no llegó por muy poco.
“Hoy corrimos igual o por encima de lo que fue ante Sao Paulo, lo cual es sano, es bueno. Ese desgaste se notó por momentos, pero la defensa hoy hizo un trabajo excelente”, explicó Mosquera tras el encuentro. Su equipo cambió el traje de gala por el de obrero.
Universitario, en cambio, solo sacó a Barreto por Murrugarra de los titulares y le dijo a los cerveceros que irían al ataque desde la primera jugada en la que apenas a los segundos Corzo llegó hasta el fondo y tiró un centro a las manos se Renato Solís. El gol en contra lo obligó a adelantar aún más sus líneas y por primera vez en el año se vio el trabajo de una volante que fechas anteriores parecía invisible.
“Es cuestión de tiempo que los resultados se den, no es un tema físico porque se ve que están corriendo mucho. Es cuestión de paciencia”, pidió Juan Pajuelo, quien atendió a la prensa en reemplazo de Ángel Comizzo. El técnico había sufrido una descompensación según su asistente.
Es noble el esfuerzo que realiza Novick entre la organización y la creación del juego, pero le falta un socio más cercano que los extremos Quintero y Urruti. Por ahora, Alfageme y Murrugarra solo fueron mucho oxígeno y poco ingenio para el uruguayo, que tampoco ha conectado con el delantero Enzo Gutiérrez.
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El partido de la Liga 1, entonces, dejó lecciones en bandos lados, y con ese aprendizaje irán a Argentina para afrontar la Copa Libertadores esta semana. Esto es lo que cada uno debe aplicar en el torneo internacional si quiere obtener un mejor resultado.
Equipo sin ángel
La ‘U’ no gana y ese es el dato estadístico que debe remediar de inmediato. En los últimos 15 partidos (noviembre, 2020 - abril, 2021) solo ha conseguido 3 victorias y 4 empates contra 8 derrotas entre el torneo local y la Libertadores. En la directiva no piensan sacar a Ángel Comizzo así pierda el miércoles contra Defensa y Justicia por la Copa, y esa es casi una sentencia.
En el partido con Palmeiras estaba tan marcado que debían jugar a defenderse desde el inicio que cuando el balón llegaba a alguno de los atacantes, éste no presentaba mayores soluciones. A la ‘U’ le cayó del cielo la expulsión Alan Empereur, y en tres minutos entre un cabezazo y un zapatazo de Gutiérrez empató el partido.
Antes de esos dos goles, casi no se había llegado con franqueza al arco de Palmeiras. Con un hombre más le peleó la posesión del balón al ‘Verdao’ (terminó en 47%), también acortó el número de disparos al arco (8 contra 20 del rival) y finalmente puso la pierna fuerte y lo superó en el conteo de faltas (22 contra 21), un déficit que se había notado contra Melgar, Cantolao y San Martín.
Estos 30 minutos contra los brasileños dejaron la sensación de que, si se lo propone, Universitario puede echarse a jugar, todo en función de lo que pueda hacer Hernán Novick, en quien se sostiene todos los argumentos del equipo. Por eso, contra Cristal, Comizzo apenas movió a un jugador (salió Barreto, entró Murrugarra), pero le dio otro espíritu a su equipo.
La orden fue lanzarse al ataque. Primero con cierto orden, y luego utilizando el caos para llevar a Cristal al error. Según Sofascore, de los 16 disparos totales solo 3 llegaron al arco rimense y ninguno pudo convertirse en gol. Al contrario, hicieron crecer a la figura de Renato Solís, el jugador del partido.
A pesar de que el primer tiempo terminó con 4 amonestados (Valverde, Novick, Urruti y Alonso), Cristal siempre estuvo más dispuesto a cortar las jugadas y acabó cometiendo 24 faltas sobre 13 de los cremas. La segunda etapa, con la ‘U’ gobernando el 56% de la posesión del balón, los rimenses siguieron pegando y acabaron con 6 amonestados (Merlo, González, Madrid, Távara, Hohberg y Loyola).
¿Fue el mejor partido del año para los cremas? Sí, y lo puede sustentar el 80% de pases correctos entre sus jugadores (339 de 423). Cuando Cristal hizo la jugada de meter a los extremos titulares -Corozo y Ávila-, la ‘U’ continuó manejando la pelota y se vio menos comprometido en defensa. Hubiese sido justo marcar el gol, pero Roberto Mosquera sacó a Távara por Loyola, y con Madrid de tercer zaguero central le metió el candado al 1-0 con línea de cinco defensores.
Esta leve mejoría merengue debe continuar. Si Palmeiras y Cristal fueron las pruebas de margen de error, el miércoles contra Defensa y Justicia se debe notar que hay una idea de juego firme para encontrar al fin una victoria.
Si quiere celeste
El diagnóstico más cercano para calificar qué hizo bien Cristal contra Universitario es observar que entre el martes, que perdió 3-0 contra Sao Paulo, y el domingo, que ganó ajustado 1-0 a la ‘U’, se probó asimismo que también puede ser un equipo defensivo.
El 4-3-3 que plantea Roberto Mosquera está visto como un equipo muy ofensivo, una máquina que lidera las estadísticas con contundencia. Es el único de la Liga 1 que suma capote de 5 victorias, suma 12 goles en total y solo recibió 1 tanto, dejó su valla invicta en 4 de los 5 partidos, además, el promedio de posesión del balón supera el 60% y en cuestión de precisión de pases tiene más del 80%. Contra la ‘U’ cometió 24 faltas, y ya supera más de 100 en el torneo 2021.
Todos estos datos no los puedo sustentar en su partido contra Sao Paulo en el Estadio Nacional. El equipo de Hernán Crespo fue mejor línea por línea y le pasó la factura a la propuesta de jugar de igual a igual. Con jugadores más experimentados como Dani Alves, el cuadro paulista sacó sus mejores argumentos para encontrar las debilidades y conseguir la goleada.
Cristal perdió contra Sao Paulo en la posesión del balón (solo 44%), disparos totales (8 contra 11), faltas (13 contra 18), pases (418 contra 541) y pases acertados (75% contra 83%). Una pateadura que le sirvió de lección para salir a enfrentar a Universitario con otro argumento y para plantarse ante Racing con mayores reservas.
El partido contra la ‘U’ puede ser la prueba de rigor. Renunciar a tener más tiempo el balón, por ejemplo, (44% contra los cremas) para buscar hacer daño con contraataques de Corozo y Ávila, que deberían volver a ser titulares. Seguir siendo ásperos en las pelotas divididas (cometieron 24 faltas) buscando cortar avances o jugadas de peligro en zona alejadas al área. Y volcar toda la efectividad que muestran en Liga 1 (12 goles) en su experiencia en la Copa Libertadores, donde comenzaron con 3 goles en contra.
Por el sistema de rotación que tiene el equipo en el arco, el partido contra Racing le toca jugarlo a Alejandro Duarte. Sin embargo, con Renato Solís siendo figura con 3 atajadas claves ante la ‘U’, no sería descabellado comenzar a plantearse la elección de un arquero por encima del otro para darle consolidación al puesto.
El ultraofensivo Cristal, entonces, ya se probó que también sabe defenderse. Es hora de ponerlo en práctica en un torneo mucho más competitivo que el fútbol peruano.
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