Un video suyo en Instagram la convirtió en tendencia en el abril de 2021. La pequeña Paige Tobin, una niña de ascendencia irlandesa-australiana, se lucía dominando a la perfección el skate. Con el pasar de los meses las grabaciones siguieron conquistando las redes sociales y ahora vuelve a sorprender al “surfear por primera vez”, demostrando que el deporte está en sus venas. Esta es su genial historia donde la adrenalina está presente en cada minuto.
Esta amante del skateboarding en Australia, que tiene como ídolo a la leyenda Tony Hawk, subió por primera vez a una patineta a los 2 años y con la práctica constante llegó a dominar una rampa estilo ‘bowl’ de más de 3.5 metros de profundidad, hecho que la catapultó a la fama mundial.
Como toda una niña que cree en la magia, pero también es fiel a sus sueños, Paige Tobin se luce sobre el skate con vestido de princesa color rosa y zapatillas, pero también con vestimenta más acorde a este deporte. Eso sí, nunca falta el casco de protección, así como las coderas y rodilleras para que no ocurra ningún accidente.
Sus padres son los encargados de grabar los videos que acaparan la atención de todos en Instagram y por los que le llueven las mejores felicitaciones.
“Sabía que obtendría muchos me gusta porque el video es súper lindo, pero no esperaba que se volviera mega viral (...) ella es una patinadora y eso es lo suyo. Quiero que haga lo que le gusta y ama”, contó en abril a The New York Post la mamá de Paige, Emma, quien administra la popular cuenta de Instagram de su hija.
La orgullosa madre narró que “desde que era muy pequeña, siempre ha superado los límites. Ella andaba en scooter por la casa antes de que pudiera caminar. Caminaba a los ocho o nueve meses”.
De la rampa al mar
Paige Tobin, quien tiene acuerdos de patrocinio con diversas marcas australianas y estadounidenses, es toda una deportista no solo en el skateboarding, sino que sumó al surf en su lista de prioridades, donde también está Barbie. En un nuevo video en Instagram narra que “comencé a surfear por mi cuenta por primera vez este fin de semana en nuestra pequeña playa local”.
Sin dejar de sonreír y con el traje adecuado, la pequeña de 6 años empezó a pararse en la tabla y disfrutar del mar, algo que antes hacía con compañía de su mamá, pero ahora ingresa sola al agua. Además, durante todo el mes de septiembre estará dominando las olas como parte de una campaña de donación para ayudar a cambiar las tasas de mortalidad materna e infantil.