La nueva lesión de Neymar ha generado todo tipo de comentarios, desde la preocupación hasta la burla. Doce minutos en el amistoso de Brasil ante Nigeria (1-1), el domingo en Singapur, fue lo que duró el delantero en la cancha para encender todas las alarmas. El crack se tomó la parte posterior del muslo izquierdo antes de ser reemplazado por Coutinho. ¿El diagnóstico? El PSG informa que se trata de una lesión de grado 2 en los isquiotibiales y serán cuatro semanas de para. Con ello ‘Ney’ acumula 16 lesiones desde que llegó al Viejo Continente para jugar por el Barcelona en el 2013. Que es una estrella de cristal, ya nadie lo duda.
“Le Parisien” optó por caricaturizar la situación mostrando una viñeta de Neymar durante una consulta médica. “No es una cosa importante y el carnaval es de aquí a cuatro meses. Estarás recuperado antes”, dice el doctor. La respuesta del brasileño: “Qué lástima”. Así se lo toma con humor el diario francés ante el enésimo inconveniente del brasileño en París.
Lo real es que el atacante ya tiene más de 500 días de baja -según un informe del rotativo español “Sport”- por todo tipo de molestias, desde lesiones graves como la fisura en el quinto metatarsiano del pie derecho, que lo sacó de circulación durante tres meses en el 2018, hasta pequeñas dolencias musculares.
Neymar venía recuperando el ritmo tras estar 90 días parado por la rotura de los ligamentos de su tobillo izquierdo. Aquella baja ocurrió antes de la última Copa América, durante el amistoso frente a Qatar en junio de este año.
“Sintió una molestia. Pidió continuar porque creyó que podría desaparecer porque no era nada consistente, pero luego vio que no era normal y prefirió salir para no tener ninguna complicación mayor”, explicó el médico de la ‘Canarinha’, Rodrigo Lasmar, quien esperaba el resultado de la resonancia magnética a la que fue sometido el atacante en París.
Al tiempo, ‘Ney’ subió una foto de su pierna afectada en sus redes sociales con la inscripción “recuperación” tras ‘celebrar’ su partido 101 con el Scratch (cuenta con 61 goles). Curiosamente, el retorno del atacante del PSG a su selección coincide con el inicio de la racha negativa del cuadro que dirige Tite. Tras ganar la Copa América en su país, Brasil no volvió a ganar. Disputó cuatro amistosos con ‘Ney’ teniendo un saldo negativo: 2-2 frente a Colombia, 0-1 ante Perú y los recientes empates 1-1 contra Senegal y contra Nigeria.
Considerando su sueldo de 30 millones de euros al año, cada día fuera de la cancha le cuesta un ojo de la cara al PSG. Esta temporada, por ejemplo, solo ha podido jugar 5 de los 12 partidos disputados por el cuadro parisino. Y se perderá el duelo de Champions League ante el Brujas en Bélgica, el próximo 22 de octubre. No estuvo ante el Real Madrid (3-0) ni tampoco frente al Galatasaray (1-0) debido a una suspensión. Pese a ello, el cuadro dirigido por el alemán Thomas Tuchel lidera en los dos frentes, tanto en la Ligue 1 como en el máximo torneo europeo.
Esta tendencia a la baja del brasileño ya generó el repudio de la hinchada parisina, que no le perdona tampoco su intento de fuga en el último mercado de pases cuando buscó irse primero al Real Madrid y luego al Barcelona, incluso el diario “Marca” publicó que el delantero llegó a hablar con Sergio Ramos, Marcelo, Casemiro y Luka Modric para que ejerzan presión al presidente merengue Florentino Pérez.
“Quería salir en verano pero ahora estoy feliz en el PSG”, dijo hace unos días el brasileño para congraciarse con los seguidores de su club. Palabras más, palabras menos, lo que Neymar no puede quitarse es la etiqueta de un diamante demasiado “frágil”.