Paolo Guerrero fue la figura excluyente en la victoria de su club, el Corinthians, frente al Palmeiras. El delantero nacional marcó el primer tanto de su equipo y luego participó de una gresca.
Transcurría el minuto 25 del complemento, cuando Guerrero controló el balón y comenzó a pisarlo frente a la marca de Wendel, a quien no le gustó la jugada del peruano y lo golpeó. El atacante del 'Timao' le increpó la acción y desató una pequeña pelea en donde participaron varios jugadores de ambos equipos.
Al final, los ánimos se calmaron y el encuentro continuó. Sin embargo, tanto Guerrero como Wendel fueron amonestados con tarjeta amarilla.