NBA: irreconocibles Warriors a un paso de la eliminación

Casi nadie esperaba que los campeones defensores retornasen de su expedición a Oklahoma City con dos palizas a cuestas en la NBA, dos actuaciones que han desdibujado la espectacularidad de un consistente juego que los llevaron a arrasar en la temporada regular (consiguieron la mejor marca de la historia: 73-9) y superar claramente a Houston y Portland en los playoffs. Los Guerreros han concedido 251 puntos en dos presentaciones en la caldera del Chesapeake Energy Arena. Están 3-1 abajo y tendrán mucho que cambiar si pretenden volver a llegar a una gran final.

El Thunder mostró gran agresividad y una actitud digna de este tipo de partidos. Nunca dejaron libre al MVP Stephen Curry, le hicieron una marca física y asfixiante, reduciendo sus números a solo 19 puntos y 5 asistencias y promediando una efectividad bastante pobre de 6 de 20 tiros de campo. ‘Steph’ nunca se sintió cómodo en el partido y se fue frustrando a medida de que corrían los minutos y miraba como ‘El Trueno’ se disparaba en el marcador. Esperábamos mayor capacidad de reacción y combatividad de un jugador que, ofensivamente, es el mejor del mundo, pero que, anoche, sencillamente fue borrado del campo.

Una actitud diferente mostró la otra estrella de los Warriors, Klay Thompson, quien, tras ver a su equipo perdiendo en el descanso 72-53, se rebeló ante la superioridad del quinteto local encestando 19 puntos seguidos de su equipo en el tercer cuarto, incluyendo certeros triples que enmudecieron a la afición local y llevaron al técnico local, Billy Donvan, a pedir dos tiempos y replantear su estrategia. Golden State se había acercado a 8 puntos, había que detener a los campeones y así lo hicieron.

Oklahoma retomó la presión y la pegajosa marca sobre los francotiradores visitantes, tuvieron 16 robos de balón. Sí, ¡16!; cifra poco común, especialmente si enfrentas a los campeones actuales. Russel Westbrook tuvo una noche magnífica. Todo le salió bien al base californiano: 36 puntos –incluyendo triple doble-, 11 rebotes y 11 asistencias. Una barbaridad. Penetró, lanzó, asistió; fue el líder de su equipo e incontrolable para el conjunto visitante.

Kevin Durant secundó a Westbrook con 26 puntos y 11 rebotes. Destacada actuación para el alero de 27 años, otra de las súper estrellas que está dando la talla en esta serie de finales de la Conferencia del Oeste. Quien merece una mención es, sin duda, el joven pívot neozelandés, Steve Adams, un gigante de 2 metros y 13 centímetros encargado del trabajo sucio en la pintura, jugador defensivo nato, muy físico y difícil de superar. Adams ha sido clave para los Thunders, quienes han encontrado en él al hombre que les brinda equilibrio defensivo y que es fundamental para el pick and roll, tanto con Westbrook como con Durant.

Ya sea en transiciones rápidas, con elaboraciones largas, jugando en el poste bajo o lanzando a distancia, Oklahoma ha superado largamente a Golden State en los últimos dos choques. El 133-105 del juego # 3 y el 118-94 de anoche no mienten.

‘El Trueno’ ha superado largamente en todas las facetas del juego a los ‘Guerreros’, pero, principalmente, en actitud. Quieren volver a disputar una final luego de cuatro años (perdieron 4-1 ante Miami) y están en el camino correcto. 

La serie de playoffs regresa a California y este jueves a la noche, los Warriors estarán obligados a retomar el nivel que los llevó a ser campeones. Hoy están muy lejos de ello y Steve Kerr necesita despertar el fuego sagrado de sus jugadores. 

Veremos qué pasa en el Oracle Arena. ¿Volverán a dominar Durant, Westbrook y Adams? o ¿Curry, Thompson e Iguodala podrán ser determinantes en el partido? Lo cierto es que sólo 2 de los 39 equipos que se han visto 3-1 abajo en una final de Conferencia le han podido dar vuelta a la desventaja.

Tuvieron que transcurrir 96 juegos para que los Warriors de 2015-16 –históricamente, el equipo con más victorias en una temporada regular- perdiesen dos partidos seguidos. Pero, así de sorprendente también es reparar en que, si no ganan los siguientes tres partidos, dirían adiós a esta postemporada.

Curry ha dicho que esta historia no está terminada, pero, así cómo están jugando, todo hace indicar que su galardón de MVP (Most Valuable Player) y el récord colectivo de 73 victorias podrían irse por un tubo si mañana no vemos un cambio radical.

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