No estaba LeBron James por descanso médico, pero si el Miami Heat espera lograr el tricampeonato, no puede caer ante cuadro como los Boston Celtics, que se encuentran entre los peores equipos de toda la NBA. El de ayer fue solo su triunfo 23 de la temporada.
Sin duda la figura en la victoria (101-96) fue el base Rajon Rondo. Sí, el base que compite palmo a palmo con Chris Paul por ser el mejor conductor de la toda la liga está de vuelta. Ayer solo marcó nueve puntos, pero obtuvo 10 rebotes y dio 15 asistencias para que compañeros como Avery Bradley destrozaran a su antojo a la defensa del Heat.
La mejor jugada del partido se dio en el tercer cuarto. Rondo recibió el balón y como un tiro escopeta, digno de mariscal de campo, cedió a Jeff Green para que marcara un tiro de dos puntos y pusiera en ventaja a los Celtics.
Miami ahora tiene un registro de 46 triunfos y 20 derrotas y siguen a tres juegos de los Indiana Pacers, que cayeron ante los New York Knicks en el primer partido como presidente de operaciones de Phil Jackson.