MIAMI (AP). Los Spurs de San Antonio partieron de Miami en junio pasado con un aspecto tan humano que Tim Duncan casi rompe a llorar mientras hablaba sobre lo cerca que estuvieron de obtener otro campeonato.
Arriba 3-1 en la serie y con una efectividad a un nivel nunca visto en la final de la NBA, los Spurs se dirigen a casa con una oportunidad de dar el martillazo final el domingo por la noche en el quinto partido.
El Heat de Miami, que logró arrebatarle el campeonato a los Spurs el año pasado, tiene dos días para dilucidar qué puede hacer para lograrlo de nuevo.
"Son una máquina muy bien aceitada y mueven el balón extremadamente bien", dijo LeBron James. "Te ponen en muchas situaciones difíciles. Si no actúas justo en el momento oportuno, justo en el blanco, te van a hacer pagar por ello".
Los Spurs ganaron por diferencias de 19 y 21 en los dos partidos en Miami y llevan una efectividad de 54,2% en la serie. El récord para una serie final de la NBA de cualquier extensión es de 52,7%.
El encuentro se juega a las 7 p.m. y es transmitido EN VIVO por ESPN.