Aunque el Perú recién empieza a familiarizarse con Diego Elías, lo cierto es que, en el mundo del squash, el nombre ya es conocidísimo. Y es que a sus 18 años, el peruano, que acaba de ganar medallas de plata y bronce en los Juegos Panamericanos Toronto 2015, ha dejado marca en la historia de su deporte.
Al peruano la pasión por el squash le viene de familia. No en vano es el 'Tigrillo', hijo de José Manuel 'El Tigre' Elías, quien fuera campeón nacional por casi 20 años ininterrumpidos. De chiquillo acompañaba a su papá a los entrenamientos y fue casi natural que, al tiempo, entrara a la cancha. El 'Tigre' se convirtió no solo en su entrenador -lo es hasta ahora- sino en su pareja de dobles. Juntos han sido imbatibles en torneos nacionales e internacionales de dobles.
Diego, a pesar de su edad, destacaba ampliamente sobre gente mayor. Tenía 15 años y ya jugaba -y destacaba- con la selección nacional de mayores. En el 2013, cuando estaba a la mitad de cuarto de media, decidió dejar el colegio. "Conversé con mis papás, yo sabía que quería dedicarme al squash y me apoyaron. Terminé el colegio en un programa a distancia y así pude viajar a competir y entrenar por distintas partes del mundo", le dijo a El Comercio a inicios del 2014.
Y ese 2013, Diego despegó a lo grande. Fue campeón nacional por quinta vez, campeón juvenil sudamericano (en singles y dobles), triple medallista bolivariano, campeón panamericano Sub 19 y campeón del US Open Junior, uno de los torneos internacionales más importantes del squash.
Ya en el 2014, el 'Tigrillo' ganaría su máximo logro hasta hoy: ser campeón mundial junior. El peruano venció a al egipcio Omar El Atmar -Egipto es la gran potencia en squash- por un contundente 3-0. Ahora, desde el 25 de julio, defenderá su título en una nueva edición del mundial junior. Su gran campaña le valió ser elegido el 'Deportista del año' por el IPD.
Con solo un año y medio compitiendo en los torneos de la Professional Squash Association, Diego ha escalado rápidamente en el ránking mundial. Actualmente marcha en el puesto 43 y es seguro que seguirá subiendo. "Aún me quedan algunos torneos por jugar este año. En noviembre estaré en el mundial de mayores".
Su máximo sueño es convertirse en el primer latinoamericano en ser campeón mundial de mayores. El reto es grande, pero también lo es su talento.
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— DT El Comercio (@DTElComercio) julio 14, 2015
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