Gareca ha sabido llegar al jugador y darle confianza. Un ejemplo claro es Christian Cueva. (Foto: GEC)
Gareca ha sabido llegar al jugador y darle confianza. Un ejemplo claro es Christian Cueva. (Foto: GEC)
Eduardo Sotelo

Que los futbolistas cambien de equipo es frecuente, sobre todo en los que ya tienen un nombre ganado. Por ejemplo, cuando Ricardo Gareca llegó a la selección peruana, en 2015, Jefferson Farfán estaba en el Schalke 04, André Carrillo en el Sporting Lisboa y Juan Vargas en Fiorentina. Un año después, estaban en Al Jazira, Benfica y Real Betis, respectivamente. Lo que muchas veces es difícil para los futbolistas es que dar ese salto que su carrera requiere para seguir incrementando su nivel y, con eso, hacer el universo de jugadores convocables más rico. Con el ‘Tigre', muchos jugadores jóvenes tuvieron la oportunidad para mostrar su talento en la alta competición, jugando por su selección, y eso representó una vitrina para que varios clubes del mundo se fijaran en ellos. Gracias al respaldo del técnico, ganaron confianza y eso, en muchos casos, les valió oportunidades que quizás de otra forma no hubieran tenido.

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