¿Por qué Claudio se retractó sobre lo que dijo de Bielsa?

ELKIN SOTELO @Elkinsot_DT

Claudio Pizarro tuvo la hidalguía de reconocer que había cometido una ligereza al calificar a Marcelo Bielsa. Afrontó una situación que se le volvió difícil con los días a partir de una entrevista con El Comercio, y no cayó en la cobardía que algunas figuras del fútbol pronuncian cada tanto cuando están en problemas: “no dije lo que dije”, “me tergiversaron”, “me inventaron”; Claudio no. Él explicó que lo suyo fue apresuramiento.

¿Qué pasó para que Claudio se retracte de algo que afirmó con convicción? Primero, la realidad. Bielsa es reconocido mundialmente. Por todo lo demás se puede especular. Su técnico en el Bayern Múnich, Pep Guardiola, es un profundo admirador del entrenador argentino y lo consideró siempre imprescindible en su aprendizaje. La entrevista en este Diario rebotó en distintos medios del planeta y por redes sociales. Ello puede haber llegado a oídos de Pep y llamado su atención. Y de allí, algún jalón de orejas a Pizarro.

También es probable que el peruano haya comprobado que la FPF tiene intenciones de contratar al argentino o a un técnico de ese corte, como Eduardo Berizzo. Entonces, su aseveración sería inoportuna y lo dejaría fuera de los planes futuros. Además, la defensa a Markarián y a Bengoechea, a quienes conoce y les tiene confianza, podría tener una motivación: a sus 35 años aún pretende seguir en la selección como capitán.

EL JEFE
Lo concreto es que Pizarro todavía tiene mucha influencia entre los jugadores, incluso entre la nueva generación. Ayer, Carlos Zambrano declaró exactamente lo mismo que ‘Pizza’: “Los amistosos contra Inglaterra y otros están mal pactados. Ni siquiera son fecha FIFA y estaremos de vacaciones”. Y hace poco el ‘León’ también había sugerido que Markarián debía volver o, en su defecto, contratar a Bengoechea.

Se percibe que, dentro de la propia Videna, Pizarro es la voz de otros empleados de influencia que afirman el terreno para que Bengoechea o Markarián adquieran fuerza en la candidatura.

Como siempre, Manuel Burga observa todos estos movimientos para hacer su jugada política, siempre la mejor en pos de su re-reelección y no necesariamente en favor de la bicolor. Más capítulos vienen en esta historia.