Christian Cueva
Christian Cueva
Pedro Canelo

Hace una semana, aún en un clima de tranquilidad después de las fiestas de fin de año; Juan Carlos Oblitas, director deportivo de la FPF, nos declaraba sobre lo planeado en el corto plazo con la . Y cuando le consultamos sobre el comportamiento de en sus vacaciones en Trujillo nos respondió con un escueto “A veces siento que estamos muy detrás de Cueva, que es el más buscado”. A siete meses de finalizado el Mundial, es cierto que es excesivo e injusto insistir en cargarle la cruz del penal fallado ante Dinamarca. Sin embargo, su última declaración en Radio “La Red” de Argentina ha sido un autogol que duele menos que el remate desviado ante Schmeichel, aunque preocupa mucho en tiempo presente.

Lo de Cueva ha sido un balón pateado a las tribunas, un error de definición como si estuviera mano a mano frente a un golero rival. “Le pedí al director deportivo de Krasnodar que me ayude para estar cerca de mis hijos”, dijo el volante de la selección peruana manifestando su deseo de irse al fútbol argentino. ‘Aladino’ no encontró la lámpara mágica para adaptarse al fútbol ruso y pide regresar a Sudamérica. ¿Cómo defenderlo ahora?

Desde estas páginas, y en nuestra plataforma web, condenamos al desadaptado que grabó un video insultando a Cueva en el avión que lo iba a llevar hasta Rusia. Lo defendimos también de tantos “memes” y tantas burlas. Apoyamos a Ricardo Gareca cuando, quizá para protegerlo del hincha local, prefirió no convocarlo para la fecha de amistosos FIFA de noviembre. De acuerdo con todo eso.

Incluso aquí mismo explicamos que el ‘Tigre’, antes de sus vacaciones, viajó diez mil kilómetros para pedirle a Cueva que se concentre en reencaminar su carrera deportiva, que cuide su físico en las vacaciones y que tenga la certeza que iba a arrancar la temporada 2019 como un titular del once base para la Copa América y Eliminatorias.

Además, cuestionamos esas informaciones filtradas, con muy mala intención, que sugerían indisciplinas de Cueva en la gira de la selección peruana a Estados Unidos. Indagamos con todas las fuentes implicadas desde la misma Videna y pudimos concluir que no hubo inconducta. Y lo mencionamos de todas las maneras posibles.

Han sido necesarios seis partidos amistosos después del Mundial para concluir que es muy difícil reemplazar a Christian Cueva como mediapunta o extremo por izquierda. Ese talento innato que nos emocionó tanto en esa corrida por la banda antes del pase a Farfán, es algo difícil de encontrar en el universo de jugadores convocables para Gareca. Pero que a sus 27 años, Cueva vuelva a tener un problema de adaptación -le pasó algo similar en sus últimos meses en Sao Paulo- revela que existe un vacío difícil de remediar en su formación como profesional del fútbol.

Podríamos decir hasta que es la hora que el psicólogo Marcelo Márquez, que tanto trabajó con él en la selección, converse con él. Pero Márquez renunció en enero. A Christian Cueva, con su afán de irse a Independiente, ahora le toca levantarse solo. Algunos aquí ya no tenemos cómo defenderlo.

Contenido sugerido

Contenido GEC