Tatuada en los corazones de los hinchas y en el alma de los jugadores, la estela de Rusia 2018 toca ahora las arcas de los siempre necesitados clubes peruanos. Al logro deportivo que reanimó nuestra moribunda autoestima futbolera se añaden las prestaciones monetarias traducidas en números redondos. La FIFA hizo público ayer el informe del Programa de Beneficios para los Clubes y anunció la repartición de la gran torta de 209 millones de dólares. Para todos hay. Las instituciones que cedieron futbolistas en la última Copa del Mundo recibirán un premio que nunca cae mal, sobre todo en estas épocas de sumas y restas. Al fútbol peruano le asiste el derecho de 2’170.610 dólares, que irán a las cuentas de nueve equipos.
De los beneficiados es Universitario la institución que más dinero recibirá: 772.590 dólares. Premio caído del cielo para atenuar su ausencia en torneos internacionales del próximo año, y también para olvidar una temporada en crisis que lo llevó al borde de un ataque de nervios. Recordemos que entre los jugadores que fueron al Mundial como cremas se encontraban Corzo, Rodríguez y los panameños Quintero –se lesionó previo al torneo– y Tejada. Pero los merengues también se beneficiaron por Trauco, Flores, Polo y Cáceda, quienes fueron a Rusia representando a otros clubes aunque en algún momento del proceso eliminatorio pertenecieron a la institución de Ate.
La nómina de favorecidos la completan Melgar (376.390 dólares), Alianza Lima, UTC (237.720), Municipal (158.480), Sport Boys (127.350), San Martín (118.860), Sporting Cristal (99.050) y Juan Aurich (42.450), que hace poco perdió toda posibilidad de volver a la Primera División.
Para el primer mundo balompédico tan monetizado, esas cifras saben a poco, son casi ridículas para la cantidad de dinero que mueven en cada mercado de pases. La Liga Premier, que siempre marcha a la vanguardia, recibirá 37’406.940 dólares y su club top, el Manchester City, ingresará 5’003.440, un sencillo que no le alcanzará para pensar en una futura contratación.
La realidad es otra cuando hablamos de nuestro medio, y lo significativo es el comparativo del Descentralizado con los otros torneos del continente. Solo es superado por la Superliga de Argentina (2’789.672,5) y la Serie A de Brasil (2’752.882,5). De alguna forma, el proceso de Gareca ha reivindicado el producto interno, lo ha revalorizado. Perú todavía no tiene un universo de futbolistas tan amplio en el extranjero para solventar sus campañas como otras selecciones. El caso de Chile es significativo. Exportador en los últimos años, hoy solo dos de sus clubes se beneficiarán en conjunto con 254.700 dólares, un monto incluso por debajo de lo que ingresará UTC.
Ahí radica la importancia de los clubes como generadores de nuevos talentos para nutrir los procesos de la selección. Ese aporte ofrecido debe ser un buen incentivo económico para despertar el interés por producir futbolistas en sus canteras.
Rusia 2018 sigue trayendo buenas noticias. Otro motivo más para recordarlo de por vida.