La era Fossati marcha invicta pero la sensación es de derrota (2-0 a Nicaragua y, 4-1 a Dominicana, 0-0 con Paraguay y 1-0 con El Salvador). Y lo es, si me permiten, por la ausencia de esa sensibilidad que durante décadas hemos hablado de padres a hijos: la asociación para jugar al fútbol.