Siempre polémico. Nick Kyrgios se clasificó este jueves a la final de dobles del Australian Open junto a su compañero Thanasi Kokkinakis en un emocionante partido, que no solo tuvo intensidad deportiva. Dentro del enfrentamiento también se generaron momentos llamativos luego de que al tenista australiano se le rompiera su raqueta y por realizar un gesto insultante al público.
Kyrgios y su compañero derrotaron en semifinales a la pareja formada por el argentino Horacio Zeballos y el español Marcel Granollers en dos sets de 7-6 (7/4) y 6-4.
Ahora, todo se definirá entre australianos, la primera en 42 años. Kyrgios y Kokkinakis se enfrentarán a Matt Ebden y Max Purcell. La última vez que la final contó con cuatro tenistas locales fue en la edición de 1980, cuando Mark Edmonson y Kim Warwick vencieron a sus compatriotas Peter McNamara y Paul McNamee.
En un nuevo episodio que alimenta su imagen de ‘chico malo’ del tenis, Kyrgios se quejó de la máquina que controla la tensión de la red. Después dirigió su ira hacia el público de la Rod Laver Arena por considerar que hacía demasiado ruido entre su primer y segundo saque; todo ello dentro del encuentro.
Todo ello culminado con una ‘peineta’ hacia el público, un pelotazo contra el muro de la pista, y rompiendo su raqueta contra el suelo después de haber perdido un servicio.
“¿Cuándo va a calmar a esta gente?”, lanzó Kyrgios al árbitro James Keothavong. “¿Les va a dejar que griten mientras sirvo?”, prosiguió. Sin embargo, Kokkinakis había estimado durante el torneo que “cuanta mayor agitación, mejor para todos”, refiriéndose al público de Melbourne.