Novaj Djokovic y Rafael Nadal no pudieron evitar las lágrimas en la ceremonia de premiación del torneo de Roland Garros, que el español ganó tras casi tres horas de partido. El tenista serbio lloró tras un largo y emotivo aplauso por el público presente en el Philippe Chatrier.
Por otro lado, Nadal lloró en el momento que observaba elevarse la bandera de España en lo más alto de la cancha. El tenista español no aguantó las lágrimas y, mientras levantaba el trofeo, se las intentaba secar.