El español Rafael Nadal le dio hoy más volumen aún a su candidatura a un segundo título en el Abierto de tenis de Australia al avanzar en forma arrasadora a los octavos de final. Número uno del mundo, Nadal abrumó al francés Gael Monfils, 32 de la clasificación, con un impactante 6-1, 6-2 y 6-3 en una fresca noche en el Rod Laver Arena de Melbourne.
"Gaël es siempre una prueba dura, es un gran jugador, pero creo que hoy he jugado el mejor tenis desde hace tiempo en este torneo, por lo que estoy muy satisfecho", afirmó Nadal al final del partido.
Rafa buscará el lunes los cuartos de final midiéndose al japonés Kei Nishikori, vencedor hoy del estadounidense Donald Young por 7-5, 6-1 y 6-0. Antes de comenzar el partido, Nadal tenía probablemente certezas acerca de sus posibilidades de éxito ante Monfils, al que había derrotado en nueve de sus 11 enfrentamientos.
Precisión, intensidad y calidad fueron las características del mallorquín en el juego de hoy. Nadal fue una máquina de tenis con especial acierto en la derecha, golpe que es un verdadero termómetro de su juego: prácticamente cada vez que la derecha le funcionó, el español ganó un gran título. En Australia está buscando el Grand Slam 14 de su carrera.
Monfils, con desorden e inconstancia, tuvo aciertos y mostró un físico privilegiado, aunque fue por momentos un juguete en manos de Nadal, corriendo de lado a lado sin poder tomar el control. Así, con un saque ganador, Nadal dio en dos horas y cuatro minutos un paso más hacia el objetivo de estar en la definición de un torneo que ganó en 2009 y el año pasado no pudo jugar por lesión.