Uno de los partidos más recordados entre Rafael Nadal y Roger Federer fue el que protagonizaron en el 2009, en la final del Abierto de Australia. Fue una batalla que se extendió a cinco sets y duró más de cuatro horas.
El español le propinó ese día al suizo uno de sus derrotas más dolorosas. Fue con parciales de 7-5, 3-6, 7-6, 3-6 y 6-2. Nadal alzó su sexto Grand Slam (ahora tiene 13) e impidió que Roger alcance su título 14 de Grand Slam, que le iba a permitir igualar al histórico Pete Sampras. Lo lograría años más tarde.
Federer no pudo aguantar las lágrimas a la hora de la premiación. Pocas veces se le había visto tan dolido. Ahora se volverá a ver las caras con el español en la semifinal del Abierto de Australia 2014. El duelo se presenta como el más importante en lo que va del año.